lunes, 31 de diciembre de 2012

Feliz año

Hoy acaba el 2012. No me da ninguna pena, no lo voy a echar de menos e incluso gritaría ¡yupi! si no fuera por que el 2013 no parece que vaya a ser mejor. Pero como la esperanza es lo único que se pierde, voy a darle un voto de confianza. Para empezar vamos a tomárnoslo por el lado frívolo; esta noche voy a subirme al taconazo, es importante sentirte estupenda para que a los demás también se lo parezcas (aunque sea una ilusión óptica debida a una enajenación mental transitoria). También hay que observar el tema del saneamiento; voy a sacar de mi vida a algunas personas que durante el año pasado no han sido lo que se esperaban y a todas aquellas otras que, simplemente, no me aportan absolutamente nada (estoy haciendo un lista para no olvidarme de ninguna). Finalmente los malditos propósitos. Como he descubierto que al final nunca los cumplo, mis propósitos van a ser despropósitos; como tirarme en paracaídas o hacer parapente, con mi vértigo has escasas posibilidades.
Os deseo a todos un feliz año 2013.

viernes, 28 de diciembre de 2012

Yo soy single ¿y qué?

Entre "Misión Olvido" y otros libros mi madre me ha regalado "Yo soy single ¿y qué?". Aún no lo he leído, no sé si es bueno o es malo pero me ha dado una alegría enorme recibirlo. Significa que mi madre por fin ha aceptado que mi príncipe azul salió rana, que con mi media naranja han hecho un zumo y que mi alma gemela se perdió en el espacio. Se acabó oír hablar de hijos y sobrinos de amigas y conocidas. Y se acabaron los comentarios de "cuando te cases" o "cuando tengas niños". ¡Soy libre! Me he quitado un peso de encima y me siento totalmente aliviada de la presión que sentía hasta estas navidades. Ahora ya no tengo ni que intentarlo. Porque reconozcámoslo, cuando tu madre lo acepta, te toca un pie lo que piense el resto del mundo. Así que yo soy single ¿y qué?

jueves, 27 de diciembre de 2012

Candidato número 1

Conocí al candidato número 1. Fuimos a cenar cinco para no hacer la cosa demasiado forzada. Nos pasamos la cena hablando de las relaciones entre hombres y mujeres, me sentía examinada con cada comentario que yo pronunciaba. Él daba su opinión, bastante clásica por cierto, aunque no se aclaraba demasiado, decía lo contento que estaba solo y al segundo declaraba las ganas de encontrar a alguien y formar un familia. Esa segunda parte hacía que yo quisiera salir corriendo. Lo cierto es que no hubo química; era simpático, educado, ameno... pero no, había algo que no me convencía. Pero no tardé en descubrir que era, soltó "la frase": Los hombres somos básicos. No la soporto. En ese momento supe que no había nada que hacer. Contesté que yo no entendía a los hombres y creo que a él le pasó exactamente lo mismo. Lo bueno es que como los dos lo vimos clarísimo probablemente he hecho un nuevo amigo sin complicaciones. Ahora sólo espero que después del éxito que han tenido con él, me dejen tranquila el resto de las vacaciones y se olviden del resto de candidatos que tenían en cola. Ya decía yo que no tenían ni idea de lo que a mi me gusta.

viernes, 21 de diciembre de 2012

Feliz Navidad

Las fiestas ya están aquí. Esta tarde cogeré un tren rumbo a Barcelona (si los mayas me lo permiten) y llegaré a casa dispuesta a que mi madre haga foie conmigo. Porque ¿para qué resistirse cuando sabes que, al final, esos dos quilos de más no te los va a quitar nadie? Al menos voy a disfrutarlos. Ya en enero volveremos al gimnasio y a los puestos de frutas y verduras del mercado. Durante dos semanas voy a dejarme mimar porque yo lo valgo.
Os desearía que os tocara la lotería de Navidad pero he de reconocer que no sería un deseo sincero porque a quien realmente quiero que toque es a mí. Así que os deseo a todos Feliz Navidad y que el año 2013 esté lleno de buenas noticias (que ya va siendo hora) y buenos momentos.

miércoles, 19 de diciembre de 2012

Choque con un autobús.

Ayer mi madre chocó con un autobús. Como ella misma dice: "yo iba por donde no debía, pero no fue culpa mía sino del autobús que surgió de la nada". ¡Estos autobuses! ¡Es que no se les ven! Ella está bien. Y su acompañante, a parte del susto y pensarse dos veces antes de subirse de nuevo al coche de mi madre, también está perfectamente. El coche sólo unos rasguños, se ha cargado la parte de atrás de un espejo retrovisor, pero como el cristal aguanta, puede seguir conduciendo hasta que se lo arreglen. El autobús en cambio... no tuvo tanta suerte. Cuando mi madre bajaba del coche para ver los daños oyó un estruendo de cristales y vio como empezaban a bajar los pasajeros. Y cuál fue su sorpresa cuando vio que la luna delantera del autobús se hacía añicos. No penséis que conduce un todoterreno enorme o algo parecido a un tanque de combate. No, no. Ella es capaz de derribar un autobús con su Clase A. El conductor bajó y mi madre ya estaba preparada para recibir toda clase de improperios, cuando el hombre, blanco como el papel, se acercó a ella preguntando si estaba bien. Insistió varias veces y mi madre insistía en que no le pasaba nada. El pobre hombre creo que aún no ha asimilado el encuentro con mi madre. Finalmente, hicieron el parte amistoso. Sólo ella es capaz de chocar con un autobús y mientras ella sale indemne, el autobús tiene destrozos como si le hubieran lanzado un obús. Entenderéis porque es mejor no llevarle la contraria  ¿verdad?

jueves, 13 de diciembre de 2012

Se me acumula el trabajo

Ayer estuve "wasapeando" con mi coach sentimental. Sí, el mismo que despedí a las 24 horas de haberlo contratado, ha vuelto a su puesto, en periodo de prueba. Está de vacaciones en la otra punta del mundo pero en cuanto encuentra una zona wifi me pregunta cómo van las cosas y comentamos la jugada. En fin, que ayer me dijo que cuando fuera a Barcelona iba a buscarme ganado fresco (él lo llama así, no yo, y es uno de los vuestros chicos, así  que enfadaros con él y no conmigo). Le contesté que una amiga ya se le había adelantado. Le pareció perfecto. ¿Perfecto? Creo que en cuanto vuelva al continente europeo voy a tener que despedirlo, porque aunque lo intenta, no acaba de coger mi mensaje. Así que a parte de los dos candidatos de mi amiga, voy a tener el "ganado fresco" de mi coach. Sólo falta que se les una mi madre y tendré el equipo completo. No necesito ganado fresco, no quiero conocer a "chicos estupendos" que luego resultan ser como todos, lo que quiero y necesito es un poco de tiempo y espacio, pero veo que tendré que buscarlo por mi cuenta.

miércoles, 12 de diciembre de 2012

Los candidatos

Ayer estuve hablando con una amiga que me preguntó cuando llegaba a Barcelona. Entonces soltó la "gracia". Tengo un chico perfecto para ti, te lo presentaré cuando vengas. Se me empezaron a quitar las ganas de llegar. En serio y además se lo demostré. "Bueno, nunca es malo conocer gente nueva" añadió para ver si así yo ponía algo de entusiasmo. No lo consiguió. Luego empezó a venderme la moto: es fantástico (ya veremos), os parecéis en muchas cosas (malo, malo), es encantador (¿de serpientes?), educado (¿por quién?), etc. Yo escuché el cúmulo de virtudes sin inmutarme. Luego, viendo el poco éxito conseguido con ese candidato, me contó que tenía un segundo elemento preparado ¡genial! No quieres taza... Esta vez no se molestó en vendérmelo con tanta insistencia, sólo dijo que podría ser mi tipo. ¿Mi tipo? Ni siquiera yo sé cual es mi tipo. Me han gustado los individuos más variopintos así que no sé como va a ser mi tipo si no tengo ninguno. Y así estamos, a punto de llegar a casa como El Almendro y sin saber muy bien como voy a escaquearme de tanta presentación. Probablemente no me quede más remedio que conocerlos, ya os contaré el desastre.

lunes, 3 de diciembre de 2012

¡Despierta!

Los hombres son todos iguales. Sí, son iguales. No penséis queridas mías que va a aparecer ese hombre distinto que te va a comprender y apoyar. Ese no existe. Es un invento de la naturaleza para la supervivencia de la especie. Lo peor es que nos gustan, que le vamos a hacer. Así que hay que ir despertando y aceptar lo que un hombre está dispuesto a hacer por ti y lo que no. Por ejemplo, puede oírte pero no pidas que te escuche. Su cerebro no está programado para ello. Puede comprender tus palabras pero no tiene ni idea de lo que estás hablando. Puede intuir que algo pasa pero no pretendas que intente averiguarlo. Es demasiado esfuerzo sin confirmación de resultados, porque ellos lo que quieren son resultados. Y sobre todo, lo que nunca puede hacer es tener una conversación seria y sincera. Juegan con tu buena fe. Quedas para hablar y al rato te das cuenta de que la única que has hablado eres tú, que la única que has dicho como te sientes eres tú y encima intentará solucionarlo de la misma manera que arregla el motor del coche. Porque no te olvides, el problema lo tienes tú, él está perfectamente, y no entiende porqué tu estás tan triste (aunque ellos prefieren decir tan rara). Así que una vez aceptado todos estos puntos, ya puedes enfrentarte a ellos: no digas nada, no muestres lo que sientes, sonríe y no les escuches. Juega con sus mismas cartas y puede que te lleves alguna baza.

martes, 27 de noviembre de 2012

El mareante profesional

El otro día estuve picando algo con una amiga y me habló de un chico que en el papel es perfecto; educado, inteligente, simpático, trabajador y encima guapo, vaya que lo tenía todo el chaval. El elemento en cuestión no vive en la misma ciudad que ella, pero por trabajo iba bastante. Cada vez que iba, le llamaba y se iban a cenar mano a mano. En fin, por circunstancias laborales ya no tiene que ir a la ciudad de ella. Entonces le pregunté a ella ¿qué tal?, si se han visto, y ella muy seria me contesta que no importa porque sabe perfectamente que ella no le gusta. ¿Cómo? Entonces ¿para qué te marea? ¡Ah! Misterios de la vida. Los hay mareantes profesionales. Se dedican a pasear al personal sin mojarse, sin que tu puedas saber si es el principio de una bonita amistad o hay algo más. No se definen porque les va bien tener una acompañante para el día que no tienen plan o el plan que tienen es un rollo patatero y no quieren ir solos. Así siguen hasta que tu te das cuenta que ahí no hay nada, ni siquiera amistad porque a los amigos no se les trata así; confundiéndoles constantemente, y decides darle portazo. En fin, si realmente ella está segura de que él no siente nada, le aconsejo ya no que pase página, sino que cambie de libro directamente.

lunes, 26 de noviembre de 2012

Intolerancia a la lactosa

Una prima mía me contó hace una semana que le habían diagnosticado intolerancia a la lactosa. Está muy de moda en el ambientillo médico encontrar intolerancias a los alimentos más básicos. Ella llevaba 15 días sin tomar leche, yogures, queso, mantequilla... en fin, cualquier alimento que tuviera lactosa y que no se había encontrado demasiado bien. Eso me lo contó un jueves. Cual es mi sorpresa cuando el viernes, en la fiesta de su hermana, la veo zampándose un buen trozo de queso manchego curado. "¿Pero tú no tenías intolerancia a la lactosa?". Sí, me contesta, pero después de 15 días sin tomar nada que tuviera lactosa quiero ver qué pasa por tomarme un trozo de queso. A otros que le preguntaron contestaba simplemente que el queso curado manchego no contaba. El sábado fuimos a comer y comentamos su ataque al queso y ella contesta que tenía mucho dolor de cabeza, y eso que sólo había probado un trocito de nada de queso (que casualidad que justo el que se tomó lo vimos todos...) y un poco los postres. ¡Los postres! Sólo en uno, que había visto a unos de mis tíos prepararlo, llevaba un bote de leche condensada... Y esto lo cuenta mientras se toma la nata de adorno en el surtido de postres que habíamos pedido.... A su dolor de cabeza yo le contesté que no era intolerancia a la lactosa (además creo seriamente que debería pedir una segunda opinión) eso era una resaca en toda regla.

miércoles, 21 de noviembre de 2012

Paranoica

Tengo la sensación de estar un poco paranoica. Parece que veo cosas que no son. Por ejemplo, el que alguien me excluyó de un whatsapp o email de grupo en el que debería haber estado incluida. ¿Son imaginaciones mías o esa persona denota enemistad manifiesta? La opinión general es que ella es rara. ¿Y con eso yo tengo que aceptar que sea una borde conmigo? Decidí ignorarlo y seguir con lo mío, que trabajo me cuesta, pero la tengo apuntada, que conste.
Pero sigamos con los ejemplos de mi reciente paranoia. Últimamente un amigo, a mi me parece, que está un poco extraño. En un principio me dije que quizás estaba molesto conmigo  pero yo no lo había hecho nada. Opción A descartada. Estará enfadado, preocupado, molesto por algo que le ha pasado, pensé. Decidí preguntar. Según él, no le pasa nada. Opción B también descartada ¡Otra vez con alucinaciones! ¿Me estaré volviendo loca? 
Evidentemente debo tener un problema. Primer paso importante para solucionarlo: soy consciente de que algo pasa. Voy a aislarme un ratito, a ver si tengo suerte y la paranoia es pasajera. Segundo paso para solucionarlo: actuar. Estoy en el buen camino. ¡Yupi!

lunes, 12 de noviembre de 2012

Maldita gripe

Se suponía que estos días tenía que dedicarme a coger fuerzas para estar más guerrera que Brave Heart, pero como estamos hablando de mí, en vez de coger fuerzas cogí la gripe. Cuatro días encerrada en casa. Basta que no puedas salir para que tengas los antojos más dispares. Lo cierto es que hubo un momento que me importó un pimiento la fiebre y el peligro de neumonía y a punto estuve de salir a la calle a por una buena ración de chucherías. Mi madre justo llamó en ese momento. ¿Cómo lo saben? ¿Cómo saben que estás a punto de cometer una estupidez? En fin, que tras hablar con ella, callando como una muerta en que punto me había pillado, me di cuenta que lo mejor es que estuviera quietita en casa y me recuperara. Asi que me quedé enclaustrada en casa haciendo zapping ( porque no había manera de encontrar nada potable en la tele) y leyendo cuando la cabeza dejaba de decirme: exploto, exploto... Hoy, a parte de que aún no he conseguido separarme del kleenex, empiezo a hacer vida normal. Y ahora tengo tres días para entrenarme como guerrera... No me da tiempo, lo siento, pero no me da tiempo, a ver si para el finde siguiente....

miércoles, 7 de noviembre de 2012

Guerrera

El otro día una de mis primas favoritas me dijo que hay que ser guerrera. Todo venía a que el próximo fin de semana celebra su cumpleaños y como ella mis mo dijo: descansa que en mi fiesta te quiero a tope. Y me encantaría estar a tope en su cumpleaños pero circunstancias ajenas a mi voluntad me impiden que me recupere. Por un lado la gente mala que hay por el mundo, a la que parezco atraer como un imán. Y por otro, el hecho de que me doy cuenta de que hay gente que se piensa que soy idiota. Sí, por el hecho de no contestar o montar en cólera y simplemente ignorar ciertos "feos" para seguir tranquilamente con mi vida, resulta que eres una pánfila. De pánfila no tengo un pelo, sino que invierto mi energía y tiempo en lo que realmente me parece que vale la pena. Pero en fin, eso no significa que el que me tomen por tonta no me afecte y mine mi espíritu, así que aunque intento coger fuerzas para el finde de la fiesta, me está costando un poco. Lo sé, sigo enfadada, y la última vez dije que se me pasaría... Prometo intentar que no me afecte tanto según que hechos y circunstancias. No puedo prometer que lo consiga pero sí que voy a intentarlo.

lunes, 29 de octubre de 2012

Adaptación al medio

Que los hombres son distintos a las mujeres en cuanto a relaciones se refiere está más que demostrado, pero ¿Por qué no se toman la molestia en intentar comprender y actuar en consecuencia de esas diferencias? Pues por varias razones. Por un lado son unos vagos, es más cómodo que seamos nosotras las que nos adaptemos al medio que ellos hacer el mínimo esfuerzo al respecto. Y como nosotras se lo permitimos, ni lo intentan. Otra razón (que es de lo más desesperante) es su "yo soy así". ¡Alaaaaa! Y se quedan tan anchos. Con esa frasecita marcan las pautas: o lo aceptas o lo aceptas. Ya está. En cambio cuando yo digo "yo soy así" intentan reparar esa parte que no se adapta a sus necesidades. No hace mucho incluso me han llamado hipersensible. Que lo soy, es cierto, pero si lo sabes, ¿Por qué no eres más cuidadoso? Pues porque eso supone el tener en cuenta nuestras necesidades y para los hombres esas necesidades tienen la misma consideración que la existencia de los extraterrestres, como el que existan o no, no les afecta en su vida diaria, ignoran la posibilidad de que puede que sí que existan. Y aquí me encuentro yo, intentando adaptarme a un mundo que no entiendo por culpa de unos vagos egocéntricos. Y sí, hoy estoy enfadada con los hombres, por sí no había quedado del todo claro. Mañana volveré a estar más positiva al respecto (o eso espero).

lunes, 22 de octubre de 2012

Apalabrados

Estoy enganchada al juego de "Apalabrados" y encima he enganchado a otros, siempre me ha gustado el Scrable. El sábado, tomando un vino con un amigo conocí a alguien que por lo visto juega hasta el mundial del Scrable. Lo sé, no teníais ni idea que había un mundial de eso, yo tampoco. El chico en cuestión, muy simpático, me ha invitado este jueves para ir a jugar al Scrable. Por lo visto se reunen un grupo de locos por este juego todos los jueves en Madrid. Yo los jueves suelo tenerlo bastante mal pero le dije que intentaría pasarmen algún día. En realidad no creo que lo haga porque no vi a ninguno de mis amigos dispuesto a acompañarme y sola va a ser que no voy. Según mi amigo que me acompañaba tomando el vino, había ligado. Si es cierto, me subió el ego pero no pasó de ahí, era simpático, educado y amable pero es todo lo que puedo decir que ya es decirlo todo, ¿Verdad? He de agradecerle que animara mi ánimo que en este aspecto está un poco confuso y apagado por las señales tan poco claras que recibe. Respecto al Scrable, seguiremos jugando virtualmente que es mucho más seguro.

lunes, 15 de octubre de 2012

Coach sentimental

El otro día, tomando una copita y comentando como nos iban las cosas, un amigo y yo nos declaramos "coach sentimental" el uno del otro. A ver si con ayuda conseguíamos enderezar esa parte de nuestra vida. El suyo, aunque a él no se lo pareciera, era un caso bastante más peliagudo que el mío. La verdad es que yo a él, después de que me diera varios consejos en los que lo fundamental era que no fuera yo misma, lo despedí dentro de las 24 horas siguientes de haberlo contratado. Así que me he quedado sin coach, con lo de moda e "in" que está el tener uno en este momento... Lo cierto es que me alegro, todo el mundo que me da consejos sobre mi vida sentimental (tanto si los he pedido como si no) se empeñan en que vaya, de la noche a la mañana, en contra de mi naturaleza y eso es pedir peras al olmo. Yo, en cambio, como coach, soy más realista, más comprensiva, en definitiva, mejor (si no me lo digo yo...) La gente, a nuestra edad, no cambia con tanta rapidez así que voy pidiendo pasitos cortos y poco a poco llegar a la meta que nos hemos propuesto. Eso sí hay que hacerme caso.... sino que me despidan a mí también... De momento, mi pupilo progresa adecuadamente.

miércoles, 10 de octubre de 2012

Señales contradictorias

Un amigo mío lo dejó con su novia antes de verano. Al principio ella le dijo que podían seguir siendo amigos ( jua, jua, jua). Evidentemente, eso no era más que una forma de engañarse a sí misma pensando que podían seguir viéndose sin que ella sintiera nada al respecto. O se creía de hielo, o en el fondo esperaba volver a recuperarlo. Mi amigo, ingenuo y naïf va y se cree semejante trola y pasa lo que pasa... Que ella no lo ha superado y está intentando volver. Y ahora es cuando mi amigo da señales contradictorias. Una mañana ella le llama para quedar con él y mi amigo va, eso sí para decirle que no deberían verse más ¿Cómoooooo? ¿Vas a verla para decirle que no quieres verla? Ella, que no le interesa oír lo que no le gusta, ignora el discurso de él y sólo analiza el hecho de que ella le ha llamado y él ha aparecido. Conclusión: aun hay esperanza, lógica aplastante. Llegados a este punto yo sólo le pude aconsejar a mi amigo que cuando ella vuelva a llamar le diga educadamente que no deberían tener ningún contacto por una temporada. Y a la tercera llamada de ella en la que no coge el mensaje, el que no tiene que coger el teléfono es él. Es duro, pero es que no creo que sea bueno para nadie la otra opción. No creo en las amistades tras una reciente ruptura, sobre todo si quien insiste en esa "amistad" es a quien han dejado.

martes, 2 de octubre de 2012

Boda en el 2014

Por lo visto tengo que casarme en el 2014. ¡Hay que fastidiarse! No tengo ni ganas ni contrario, pero una amiga ayer me dijo que me toca ese año. A otro amigo del mismo grupo, que sí tiene contraria aunque aún no se ha manifestado respecto a su paso por la vicaría, le han adjudicado el 2013, como ya tiene contra quien... le toca antes. Eso lo han decidido los casados, claro. Tienen ganas de boda, no lo comprendo ni lo comparto pero puedo llegar a aceptarlo. Pero de ahí a que tenga que casarme para que ellos tengan una noche de juerga... va a ser que no. El problema es que no son los únicos, otra íntima amiga mía que no tiene nada que ver con ellos (ni siquiera sé si se conocen) me ha pedido lo mismo, que me case, que tiene tantas ganas de ir a una boda de una amiga, que son las divertidas, bla, bla, bla. Y lo gracioso es que ni siquiera me preguntan si yo tengo intención de casarme, ya no ahora, sino en algún momento. Yo no acabo de tenerlo claro pero eso no es lo importante, lo importante es montar un sarao para que todos mis amigos se diviertan a costa de que yo quede encadenada de por vida. Eso es tener amigos y lo demás son tonterías.

lunes, 1 de octubre de 2012

Momento cactus

Estoy viviendo un ataque de pánico en toda regla, pero esta vez no soy yo la que tengo un impulso irrefrenable de salir corriendo, siento que un amigo está muerto de miedo y no sé como ayudarlo. Primero porque cuando yo tengo uno hay pocas cosas que se puedan hacer al respecto hasta que haya parado un momento y respirado un poco y, segundo, porque es muy distinto al mío. Cuando yo tengo uno, lo que quiero es salir corriendo, en cambio él está en momento cactus, es decir, le han salido unas púas de metro y medio que te atraviesan como intentes acercarte. En un principio decidí hacerme la loca y actuar como si no me hubiera dado cuenta, pero viendo que no he obtenido el resultado deseado he decidido cambiar de táctica. Sí, porque cuando con una acción no tienes la reacción esperada más vale que intentes otra cosa. Pues bien, he decidido darle espacio para que respire. A ver si se calma. El no estar en Madrid ha hecho que el dicho "poner tierra por medio" sea literal. Pero vuelvo mañana y creo que él todavía pincha.

viernes, 28 de septiembre de 2012

Nuevo fichaje

Mi madre se ha unido a la "agencia matrimonial" que han creado mis amigos. Ayer, mientras le ayudaba con unos papeles me suelta: "el otro día estuve con mi amiga fulanita y me contó que todavía tiene un hijo soltero". Pues me alegro por ella, le hubiera contestado con toda la carga de ironía posible pero opté por ignorar el comentario. Pero claro, cuando a una madre se le mete una idea en la cabeza es imposible hacer como quien oye llover. Volvió al ataque. "Creímos que estaría bien presentaros" ¡Ay! Ya está, vengo unos días de visita y me montan una cita a ciegas. "Bah, seguro que es un pipiolo" le contesté rezando para que así fuera... pues no, la criatura tiene dos años más que yo. Así que volví a la táctica inicial, ignoré el comentario, sabía que cuánto más preguntara buscando incompatibilidades irreconciliables, más me vendería mi madre al posible pretendiente y menos opciones tendría de librarme de una cena con un perfecto desconocido. Mi madre no insistió más. No significa que se haya rendido, las madres no se rinden. Tan sólo que, como estratega digna de haber sido una generala de Napoleón, está preparando el siguiente ataque. Será como en las grandes batallas, por sorpresa y con un ejército totalmente organizado y dispuesto a morir por la causa. Pero estaré preparada.

jueves, 27 de septiembre de 2012

Los amigos de mis amigos ¿son mis amigos?

El otro día alguien me contaba lo mal que le caía la amiga de una amiga. A mi me pasa a menudo. Amigos de amigos míos que me caen gordos, incluso muy gordos. A parte de que estoy convencida de que eso es recíproco, no entiendo porque hay que tener una relación cordial con gente impertinente. Si es el/la novio/a de un amigo, te fastidias, te callas y sacas la sonrisa más falsa que tienes, porque es amigo tuyo y le quieres y aceptas el hecho de que se ha enamorado de una cretina (o ella de un cretino, pasa en todas partes). Pero por alguien con el que sólo coincides esporádicamente cuando no tienes manera de escaquearte, me parece un esfuerzo innecesario.  Lo sé... es bueno mantener un estado de armonía para no matarnos entre todos, y lo intento, creedme, pero la diplomacia nunca ha estado entre mis puntos fuertes, ¿para qué? si con la cara pago. Se me da mejor la guerra fría, es decir, ignorar al que me cae mal y aguantar el tipo de la mejor manera posible para no sacarle las uñas, pero sonreír.... ¡ufff! Paso. ASí que no, los amigos de mis amigos no son mis amigos, al menos, no todos.

miércoles, 19 de septiembre de 2012

Agencia matrimonial

Últimamente mis amigos están muy activos en que yo tenga una relación sentimental. Algunos tienen ya hasta el nombre del elemento en cuestión. ¡Angelito! Otros están haciendo listas de posibles candidatos. Yo los dejo hacer... sé que llegado el momento haré lo que me de la gana, así que para que gastar energía y tiempo en discutir con ellos. Deberían montar una agencia matrimonial, de ese modo harían de celestina con los que realmente quisieran, podrían cobrar por ello y además a mi me dejarían tranquila. Hay el que incluso está haciéndome chantaje: tengo hasta finales de septiembre sino él se encargará de hablar con su "concursante" al respecto. Es una pena... si cumple su amenaza se perderá una amistad de muchos años. Yo no negocio con terroristas. Y así está mi vuelta al cole... como si yo no tuviera nada más que hacer que dejarme marear por mis amigos. Además todos dan su opinión como si yo la hubiera pedido. Un poco más de fe en que yo sepa lo que me convenga ¿es mucho pedir?

viernes, 14 de septiembre de 2012

Inspiración

Hace un momento, un amigo que trabaja este viernes por la tarde me ha pedido que escribiera algo para que    las horas en la oficina le fueran más amenas. No voy a entrar en su productividad porque eso es algo que sólo le atañe a él y a su jefe. Le he contestado que si mi inspiraba pondría algo. Y lo que me ha inspirado es el tema que él me ha propuesto: "por qué no pones algo tipo: no puedo contar nada pero acabo de recibir un ramo de rosas con un billete para ir a pasar este finde a París" (sugerencia literal mediante Whatsapp).
Evidentemente no voy a escribir eso porque sería una mentira y de las gordas. Nadie me ha enviado un ramo de rosas y mucho menos un billete de avión a París. Y si me lo inventara luego tendría a muchos de vosotros llamando para preguntarme si es verdad y quien es el susodicho. Pero me ha hecho pensar ¿cuánto hace que no recibo flores? ¡Siglos! A parte del hecho de que no parece que haya quien quiera enviármelas, creo que se ha pasado de moda el que los hombres envíen flores sin ninguna razón aparente. ¡Qué pena! Con lo que nos alegra a las mujeres y lo que nos sube el ego. Los hombres se empeñan en decir que somos muy complicadas y no se dan cuenta lo fácil que es tenernos contentas. Eso sí, nada de flores para pedir perdón. No lo soporto. Suelo asociar lo que dura su arrepentimiento con la caducidad de las flores. Es decir, un suspiro. Pero que llamen al timbre y al abrir la puerta encontrarte un ramo de flores sólo porque han pensado en ti al pasar por una floristería me parece lo más. Lo sé, es anticuado y cursi, pero que le vamos a hacer, me encanta.
Lo del billete de avión tiene más miga,  no voy a entrar en ello, sólo decir que la alegría dependerá quien te lo envía y el plan en el que lo hace.

lunes, 10 de septiembre de 2012

Accidentes domésticos.

Este verano ha sido de lo más movidito. No os emocionéis, no tiene nada que ver con mi vida sentimental que en fin... no parece que avance. Ha sido un verano lleno de accidentes domésticos. Para empezar he roto tantas copas de la manera más absurda que el armario donde las guardo en la cocina hace eco. Además hemos tenido un pequeño accidente con el coche, que aunque fuera yendo a dos por hora por dentro del garaje el coche quedó como si un autobús se hubiera lanzado contra la esquina derecha de la parte delantera. También casi me traga una ola por no caer antes de salir de casa que con esas olas no puedes ir con biquini si no ahogarte intentando no perderlo. Para acabarlo de arreglar he tenido ciática, el dolor era intenso, sobre todo el de mi amor propio que en cuanto la doctora me dio su diagnóstico envejecí 100 años más o menos. Pero cuando ya pensaba que todo eso había pasado, que ya estaba de vuelta a la vida diaria en la capital, ayer fui a poner en marcha la impresora y no sólo no funcionaba sino que parecía un árbol de Navidad con todas las luces parpadeando. Llamé al servicio técnico, como es del 2004 no hay servicio técnico, solo un departamento comercial que te habla del plan renove de las impresoras. Ahora, cada vez que me acerco a cualquier objeto, copa, ordenador o un simple bolígrafo (si hay alguna manera de romper uno estoy segura que voy a ser yo la que lo descubra) voy con muchísimo cuidado y aún así sé que voy a romper algo más. ¿Se puede ser más patosa?

miércoles, 5 de septiembre de 2012

La vuelta a la meseta

Cada vez que tengo que coger el taxi para ir al aeropuerto y volver a Madrid desde mi isla bonita hay un instante en el que me pregunto ¿y si pierdo el avión? ¿Sería tan grave? Y me quedó ahí, sentada en la terraza mirando el puerto y dándole vueltas al asunto durante diez minutos. Luego reacciono y mi lado responsable decide que con lo que cuestan los aviones no estás para hacer tonterías, y volver vas a tener que volver igual, así que ¡ánimo! Y salgo por la puerta.
Mi vuelo era por la noche así que esos diez minutos se convirtieron en veinte porque había una puesta de sol preciosa. ¿Me estaré volviendo cursi? No, es que cualquier excusa es buena para no coger un avión de vuelta. Esta vez apuré un poco más y creí que iba a perder el avión de verdad. Pero cuando llegué al aeropuerto y busqué mi vuelo en la pantalla, mi avión ya tenía un aviso de "retrasado". Al final salió sólo 15 minutos más tarde pero yo, mientras esperaba sentada ante la puerta de embarque, lo quise ver como una señal. ¿Y si me está dando tiempo de pensarlo otra vez y salir por donde he entrado? Pero en realidad tampoco creo mucho en las señales y al momento mi mente racional me avisó de que eso suponía llegar todavía más tarde a casa.
Finalmente embarcamos y cerraron las puertas del avión. Ya no había escapatoria. Oficialmente se habían acabado las vacaciones.

miércoles, 25 de julio de 2012

Vacaciones

En una hora estaré camino al aeropuerto. Tengo la maleta hecha, el bolso preparado (que pesa más que la maleta) y lista para salir. Cuando te apetece algo hay que ver con que rapidez y eficiencia lo haces. Ayer se reían de mí pensando que debía llevar dos días planeando mi maleta, a veces me sorprende lo poco que me conoce la gente que más debería saber de mí. Yo, la maleta, siempre la hago el mismo día. Incluso el año pasado cuando me fui a Nueva York durante un mes, la maleta se hizo el día de salida. En fin, está bien eso de que no lo sepan todo de ti, y eso que el que más se rió lo sabe absolutamente todo de todo el mundo. Es un archivo de datos de los más variopintos de cada persona que se ha cruzado en su vida. Ya no digo de nosotros, sus amigos, que el opina que en ese hobby que tiene de recabar información, nosotros no pintamos nada porque ya lo sabe todo, sino que de personas que ha visto dos veces en su vida es capaz de tener datos sobre ellas que impresionarían al mismísimo FBI. En fin, que me he desviado del tema, hoy me voy de vacaciones y no puedo esperar a salir de la meseta y aterrizar en una playa esta misma tarde.

domingo, 22 de julio de 2012

Réquiem por un cactus

Un amigo mío, hace unos meses, se compró un cactus. Pensó que es una planta que no necesita grandes cuidados y que puede sobrevivir perfectamente en una casa en Madrid con los cambios de temperatura que eso conlleva (calefacción a más de 50 grados en invierno y aire acondicionado a menos 50 en verano). El cactus no es que sea una de mis plantas favoritas, personalmente me parece que comprarte una cosa que pincha para decorar tu casa dice algo muy curioso sobre tu personalidad, pero a gustos colores y él se lo compró encantado, incluso en Navidad le colgó bolitas como si de un abeto se tratara. No le había preguntado más por el cactus ya que, en fin, no me había dado tiempo a cogerle cariño hasta que el sábado, en una comida, nos suelta que se ha muerto. Sí, sí, el cactus ha muerto. ¿Cómo? Pero si eso sobrevive en el desierto, es decir, ¡no había ni que preocuparse en regarlo! Pues sí, había dos pruebas irrefutables. Una era que uno de los brazos se había escuchimizado tanto que parecía una pasa de corinto y la otra, era un olor parecido al de un cadáver después de diez días. ¿Y qué hizo mi amigo con su cactus, con su compañero de piso de los últimos meses? Decidió que no podía llevarlo a un contenedor tal cual, así que como un asesino de película de terror, lo cortó a trocitos. Sí, sí a trocitos, ríete tú de "La matanza de Texas" y sus sierras eléctricas, al lado de mi amigo, unos aficionados. Ahora sólo espero que mi amigo haya sustituido el cuidado de las plantas por el de los sellos, libros o figuritas de cristal, cualquier cosa que no esté viva me vale.

martes, 17 de julio de 2012

El "espantacamareros".

Con el calor que hace lo que más apetece es salir y tomarte algo en una terraza por la noche a ver si ya que el sol se ha retirado corre un poco de brisa. En Madrid, brisa, lo que se dice brisa, no corre mucha pero a partir de las nueve de la noche es la única hora en la que puedes salir de la burbuja del aire acondicionado. Así que en una de éstas, me fui a tomar algo con un amigo. Al llegar a la terraza nos encontramos con unos conocidos. Los saludamos y se acercó el camarero que con un gesto nos preguntó si nos íbamos a sentar. Yo creí que se refería a sentarse en la terraza y le dije que sí pero que en un momento. Él no me entendió y trajo dos sillas más a la mesa donde estaban sentados nuestros amigos. Nos despedimos de ellos y nos sentamos en otra mesa. Y ahí empezó todo. El camarero era uno de esos que quedan tan pocos: super amaaaable. Bueno, vale, lo reconozco, rozaba la cursilería, pero estuvo muy atento. Era bastante jovencito, con cara de buenazo y yo diría que era su primer día de trabajo, lo que era seguro es que no debía llevar ni una semana trabajando ahí, por el interés que ponía. Cuando ya llevábamos dos tintos de verano y estábamos acabando con un gintonic nos preguntó si queríamos algo más, y mi amigo muy serio le contestó que la cuenta. ¡pobre hombre! Todo nervioso y preocupado le dijo a mi amigo que si nos íbamos por lo que había dicho, que para nada quería decir que dejáramos libre la mesa. Le contestamos que no pero aún así pidió perdón tres veces más y se fue compungido hacia dentro. ¡Menuda manera de hundir al pobre camarero en la miseria! A mí me entró la risa, sobre todo cuando veo que mi amigo es el que está entonces preocupado de si había sido un poco borde. Yo, para que negarlo, le saqué jugo a la cosa y me reí un rato a su costa  Le dije a mi amigo que debería ir al baño a consolarlo porque seguro que se había encerrado ahí a llorar. Lo cierto es que no se nos volvió a acercar, ni con la cuenta ni para ver si queríamos otra copa. Pasado un rato tuvimos que reclamarle la cuenta. Desde entonces mi amigo ha pasado a ser el "espantacamareros" oficial, si algún camarero es un poco antipático con vosotros, no tenéis más que avisarlo...

miércoles, 11 de julio de 2012

Finales felices

Desde que somos pequeños nos hacen creer en los finales felices. Nos cuentan cuentos de hadas donde un príncipe maravilloso pasará por tu lado, te verá y ¡pam! amor verdadero de por vida. Si el príncipe anda un poco despistado siempre tendrás la ayuda de un hada madrina y la bruja, por más mala y maquiavélica que sea, siempre acaba perdiendo. Y eso te lo inculcan cuando eres más receptiva, dicen que el cerebro de un niño es como una esponja y esos finales felices te llegan hasta lo más profundo. Así que cuando llegas a una edad adulta resulta que para tu príncipe tu no eres su princesa, el hada madrina está de vacaciones y la bruja siempre gana llevándose al príncipe. En ese momento te quedas con cara de idiota pero llegan tus amigas y te dicen que ese no era el adecuado, que tu príncipe está por llegar, y tú vas y te lo vuelves a creer. ¿Para qué? Para que se repita la misma historia.
Hace tiempo empecé a escribir una historia, pero no encontraba el final feliz por ninguna parte. Era imposible que realmente eso pudiera acabar bien. Estuve dándole vueltas durante meses hasta que me rendí y dejé de escribirla porque para historias tristes ya tenemos el telediario todos los días. Ahora creo que voy a volver a ella pero va a ser real como la vida misma. Nada de cuentos con príncipes, princesas y hadas madrinas. Tampoco hay bruja, en esta hay un ogro.

jueves, 5 de julio de 2012

Bloqueada

Hoy estoy bloqueada. No me concentro. Cojo un avión en unas horas y aún ni siquiera he sacado la maleta. Y no es que no me apetezca el destino, me voy a mi isla bonita, a ese lugar donde entro en estado zen y la plancha del pelo se queda olvidada en un rincón, el reloj en la mesilla y el móvil aparcado. Es sólo que hoy tengo un día tonto, muy tonto. No sé porqué y eso me está matando. Normalmente existe una razón para ese estado: he tenido noticias del espacio exterior, he visto a un marciano o estoy en la luna. Pero no, mi teléfono está bastante controlado, a la calle sólo he salido cinco minutos y con el único que he cruzado un "buenos días" ha sido mi portero, y aunque es un poco raro, no podemos clasificarlo como marciano, y ¿en la luna? No, tampoco es eso. Así que estoy preocupada porque tengo un presentimiento de que algo terrible va a pasar, no terrible en plan desastre natural, pero sí en plan de que luego recordaré que el instinto está para algo y que a ver si aprendo a escucharlo.  Así que estoy bloqueada, con un poco de mal cuerpo y preocupada por lo que me espera. Creo que está llegando el tsunami del que hablaba hace días. Ya oigo el estruendo de la ola, ¡ay!

martes, 3 de julio de 2012

Eurocopa

Hemos ganado la Eurocopa, ¡yupi! Está muy bien, durante un ratito hemos estado todos apoyando a algo, todos juntos, como si nos lleváramos bien. Eso sí, ya han empezado los comentarios. Por ejemplo que la selección española done su prima por haber ganado el partido. ¿Perdón? ¡Qué cara! Yo con el dinero de los demás también haría muchas cosas. Si lo quieren donar, les honra, pero si prefieren gastárselo, eso también me parece perfecto, ponen ese dinero en circulación. Y si lo que quieren es fumárselo... en fin, es una pena, pero es suyo. También critican que esa prima no tribute en España. ¡Hay que ser hipócrita! Si a cualquiera le dicen que en lugar de que te quiten un 40% por impuestos, hay una manera totalmente legal de que sólo sea un 20%, creo que el espíritu patriótico se desinfla en ese mismo momento.
Lo que realmente me gustaría es que ese dinero vinieran a gastárselo a España de compras, comiendo, cenando y bebiendo, así ese dinero va directamente a la población. También me gustaría que los políticos predicaran con el ejemplo, es decir, que nosotros nos apretamos el cinturón pero ELLOS también: rebaja de sueldos y dietas YA. También creo que sería positivo si todos este mes de agosto nos fuésemos de vacaciones a los miles de destinos fantásticos que tenemos en España, así el dinero te lo gastas pero se queda en casa. Y por último, lo que realmente me encantaría, es que me tocara el Euromillón (ya puestos a pedir).

viernes, 29 de junio de 2012

El ego masculino ¡otra vez!

El otro día un amigo me contaba por teléfono (lo sé, no se me puede contar nada) que en una reunión (no de trabajo sino bucólica totalmente) se le acerca una chica y le dice: tu eres Fulanito. Él, sorprendido, le dice que sí y ella le cuenta que es amiga de Menganita. Él en un primer momento no cae. ¿Menganita...? ¡Ah, claro! Finalmente se acuerda de Menganita a la que hace unos 20 años que no ha vuelto a ver. Y entonces me suelta: "fíjate, tenía una fan y ni me había enterado". ¿Perdón? "Hombre, si se acuerda de mí después de 20 años..." insiste. Yo le contesté que a lo mejor se acordaba de él justamente por todo lo contrario, que podía ser que lo que pensara de él era todo menos bonito. Se quedó en silencio un minuto barajando esa posibilidad que hasta ese momento ni había contemplado y me dijo: ¡No, no, no! ¡Era una fan! Toma ego, pensé yo. Me entró la risa.

martes, 26 de junio de 2012

Montando la película

Ayer estuve cenando en un japonés con unos amigos y mientras dos se dedicaban a hablar de cosas serias, tres nos pusimos a deducir lo que ocurría en la mesa de al lado. La situación era la siguiente: llegó una pareja, ella de unos cuarenta y muchos, aunque mis amigos que son más malos le pusieron cincuenta y tantos, con pinta un poco rancia. Él andaría por la treintena recién estrenada y llevaba una barbita y un aire de "perroflauta arreglao". Llegó una chica de unos veintitantos también con pinta de "esta noche me pongo mona" pero sin ningún éxito por lo difícil que era el conjunto escogido (era un mono, ni largo ni corto, negro con flores rojas estampadas del tamaño de una pelota de tenis y una enorme cremallera que recorría toda la espalda del  mono, que por cierto tenía distintas y extrañas aberturas). 
La mujer de más edad (no vamos a decir la más vieja que no es bonito) se reía de todas las gracias que decía él mientras le iba tocando el brazo o agarrando el hombro, lo que nos pareció muy sospechoso. Nosotros, en seguida pensamos que estaban juntos, aunque para darle más diversión al asunto preferimos pensar que además había algo entre él y la tercera en discordia. ¡Confirmado! La rancia se levanta al baño y se quedan los dos jovenzuelos solos en la mesa y él ni corto ni perezoso se acerca a ella, se sienta al lado y se dedica a hacerle arrumacos durante un par de minutos para luego volver a su sitio. La otra volvió del baño sin haberse enterado absolutamente de nada. Mi teoría es que él está liado con las dos y sólo una lo sabe. Otra teoría, que a mí no me convence por las edades, es que una es la madre de él y la otra su novia. Probablemente no sea ninguna de las dos, pero que fue raro, eso es un hecho.

¡Qué calor!

Ya ha llegado el verano a Madrid y de qué manera. Hace calor, mucho calor. Pero eso no es lo peor, lo peor es que la gente saca a la calle sus peores atuendos. Por ejemplo, es difícil ver a un hombre con zapatos de verano bonitos. Lo sé, soy muuuuuuuy superficial. ¿Y qué? Además, no entiendo porqué el vestir bien está reñido con la inteligencia. Por lo visto, las mujeres tenemos que estar ciegas para que no nos etiqueten de materialisas. No puede importarnos que lleve unos zuecos de plástico con agujeritos, ¡pues a mí me importa! Y no creo en el "ya lo cambiaré", aunque durante un tiempo puede hacerte caso sobre su vestimenta, al final la cabra siempre vuelve al monte, y yo siempre he dicho que no quiero ser su madre, esa sólo hay una.  Además, ni que lo primero que ellos miraran fuera el brillo de inteligencia que tienen nuestros ojos ¿o sí? Pero otra vez volvemos a lo de siempre: ellos son así, en cambio nosotras somos unas superficiales porque nos fijamos en el exterior. Así está el mundo y nosotras sin defendernos, eso es lo que me da más rabia.

jueves, 21 de junio de 2012

Soy invisible

Para un determinado individuo soy invisible. Sí, no estoy exagerando. Puedo ir en vaqueros, vestida para matar o disfrazarme de pantera rosa que él no me ve, no reacciona. ¡Es desesperante! Y no es que él me guste pero de ahí a que ni siquiera me mire es frustrante. No se puede pasar por encima de la vanidad de una mujer, es de mala educación. ¡Qué costará un comentario! Además es que me he dado cuenta que cualquier otra se pone rimmel en el ojo y ya le hecha un piropo y le dice lo estupenda que está ese día. A veces me hace sentir la mujer más fea del mundo, menos mal que siempre hay otros que lo desmienten haciendo un comentario agradable (aunque sea mentira lo necesitamos) o dándome un repaso de arriba a abajo. Lo sé, lo del repaso puede ser desagradable (¡los hay más burros!) pero al menos tu ego se anima un poquito. Podría hacer yo lo mismo con él, pero la vanidad de los hombres no está en lo bien que les sienta una camisa, o que te des cuenta de que se ha cortado el pelo. Así que viendo que ni siquiera puedo sentirme mejor ignorándolo, me he quedado sin ideas. Pero ya se me ocurrirá algo...

domingo, 17 de junio de 2012

Operación biquini

Se van acercando las vacaciones y la prueba está en el gimnasio. Sabes lo cerca que están por el número de cintas de correr ocupadas. En mayo ya empezó a notarse, hubo unos días de buen tiempo y toooooodo el mundo se lanzó al gimnasio. Luego el tiempo cambió un poquito y las cosas volvieron más o menos a la normalidad. Pero es que ahora está a tope, y eso que yo voy a las ocho de la mañana, no quiero ni pensar como debe estar eso a las siete de la tarde. El gimnasio es la prueba física de la conciencia humana, se llena en septiembre, después de los excesos del verano, en enero, como propósito de nuevo año y en junio, la famosa operación biquini para nosotras, tableta de chocolate para ellos. Pero el resto del año hay gente, pero vamos, al menos a mis horas, no somos tampoco demasiados y nos conocemos todos de vista. Sólo eso, de vista, no estoy yo en mi mejor momento ni de mi mejor humor a  esa hora para hacer vida social, la verdad. Así que, en general (por supuesto hay excepciones) la voluntad de hacer algo, dura lo que un caramelo en la puerta de un colegio. ¡Pues sí que vamos bien!

viernes, 15 de junio de 2012

Queja a Transportes de Madrid

El domingo estaba mi hermano en Madrid con toda la familia y fuimos a tomar un café con otro matrimonio que tienen una niña y gemelos de año y medio. Estuvimos hablando sobre lo de tener gemelos y  ella nos explica que en los autobuses no le dejan subir con el carrito gemelar (y eso que no es de los anchos, es de los que va uno delante del otro) ¡Pero bueno! Por lo visto, alguna vez el conductor del autobús le ha dicho que podía subir si plegaba el carrito y cogía ella a los niños. Eso no es más que otra manera de decir "no subas", porque a ver como va a coger dos niños de año y medio y además plegar un carrito. Así que no puede moverse en la ciudad en autobús. En metro, también difícil, porque no todas las estaciones tienen ascensor e intenta tú aguantar el carrito doble en las escaleras mecánicas. Y en taxi, además de prohibitivo vuelve  a ser físicamente imposible, ya que esta vez sí que no hay más remedio que poner el carrito en el maletero y aguantar tú a los dos niños. Así que tiene vetado el transporte público, o va andando o en coche. Me contó que había enviado cartas a todo el mundo, a transportes, ayuntamiento y no sé que montón de sitios más, y a fecha de domingo no había recibido respuesta. ¡Es indignante! Dijo que incluso se estaba planteando ir a no sé qué programa de la tele que reivindican estas cosas.
Luego vamos presumiendo de ciudad, de lo bien que funciona el transporte público en Madrid, y es cierto, si  sólo llevas un bolso ¡claro!

martes, 12 de junio de 2012

¡Qué tranquilidad!

Desde que el pasado jueves saqué definitivamente de mi vida a un "torpe", siento una extraña calma. Digo extraña porque hacía mucho tiempo que no la sentía y estoy rara, felizmente rara. Es como si me hubiera sacado un peso de encima, sólo que no sabía que lo tenía hasta el momento en que he decidido ¡basta!
Lo único que me preocupa es que no tengo claro si esta calma es la de después de la tormenta o la de antes de un tsunami. Ya sabéis, ese momento en que el agua del mar está como un plato y las olas se retiran suavemente de la playa para de pronto volver conjuntamente en forma de ola gigantesca (parece que la naturaleza también conoce ese dicho de que la unión hace la fuerza). Basándome en mis antecedentes, tiene más pinta de ser la calma del tsunami, pero como no tengo ni idea por dónde va a venir la ola, he decidido no darle más vueltas, al fin y al cabo, si ha de llegar, llegará de todos modos. No es que yo sea de las que "viven el momento" y actúe por impulsossin pensar en mañana, pero por un ratito voy a disfrutar de esta tranquilidad que tan gratamente sorprendida me tiene.

lunes, 11 de junio de 2012

Liebster Blog


 Esta mañana me he llevado una muy agradable sorpresa. ¡Me han dado un premio! Yo que nunca gano nada... En fin, el sistema de Liebster Blog Award consite en que primero tengo que subir la imagen con el logo del premio a mi blog. Y ha sido toda una odisea porque no soy muy habilidosa con las máquinas. bueno, ¡hecho!
Segundo agradecer a quien te lo ha otorgado. ¡Gracias Pandora! Pandora tiene también un blog "Solteras y maravillosas" con el que me siento tantas veces identificada...
 Y tercero votar a cinco blogs que te gusten así que aquí viene mi votación. ¡Uff! ¡Qué difícil! Pero ahí va.
1. El viajero ninja. http://viajeroninja.blogspot.com.es. Me parece un blog muy interesante que con un poco de ironía te pone al día de lo que está pasando en el mundo.
2. Solteras y maravillosas. http://maravillosasysolteras.blogspot.com.es. Porque ser soltera con más de treinta es toda una aventura y contarlo supone tener mucho coraje. 
3. Room 207. http://eugenia-ymbern.blogspot.com.es. Un blog sobre decoración con increíbles y buenísimas ideas.
4.Sport Auto.http://blog.autoplus.fr. Porque soy una fan de la Fórmula 1 y me encanta como Tibo nos cuenta lo que realmente pasa en boxes.
5. The Egyptological Bibliophile. http://egyptologicalbibliophile.blogspot.com.es/. Desde pequeñita he sentido una atracción fatal hacia el mundo de la Egiptología y este blog es muy interesante al respecto.

viernes, 8 de junio de 2012

Ellos son así

Ellos son así. Y con esta frase tienes que aceptarles todo. Pues no, me niego. Estoy cansada del nosotros no pensamos por lo que no te tomes a mal algo que haya hecho porque yo ni había considerado que pudiera afectarte. ¿Perdona? ¿Cómo que tengo que perdonar porque tú no has querido filtrarlo por tu cerebro? ¿Cómo que tengo que callarme y hacerme la que no se inmuta cuando has hecho algo que tú y yo sabemos qué está mal? Es que ya sabes que los hombres somos torpes. ¿Y tengo yo la culpa de eso? ¿Por qué si el torpe eres tú, soy yo la que tengo que apechugar con ello? En fin que me he cansado de que los hombres justifiquen todas sus acciones y además nosotras se lo permitamos. Ayer, a un "torpe" lo saqué de mis amigos de Facebook y por si acaso ni siquiera se enterara, le envié un email explicándoselo. Luego mis amigos me dijeron que si me había quedado tranquila, vale, pero que seguramente él ni se había dado cuenta de su torpeza. Bueno, pues ya he hecho yo algo para que se diera cuenta. Ya está bien de permitirlo todo. ¡Yo ya no paso ni una!

martes, 5 de junio de 2012

Facebook y los ex

Generalmente, a no ser que alguien se porte conmigo de manera totalmente imperdonable, no se me pasa por la cabeza quitar a nadie de Facebook. De entre mis ex, sólo hay uno que jamás estará ahí, pero lo bueno es que todo ocurrió antes de que Facebook existiera, así que cada vez que él intenta que le agregue como amigo, le doy a ignorar y listo. Sí, sí, años más tarde, sigue intentando que seamos amigos. Con amigos cómo él no necesito enemigos, gracias. Pero eso es otra historia. Con el resto de ex (tampoco creáis que hay tantos) tengo o una relación de amistad o una relación de indiferencia total. La relación de amistad ha llegado después de bastante tiempo, no se puede ser amigos hasta que las heridas por ambas partes estén curadas, cicatrizadas y haya habido una operación de cirugía estética para que desaparezcan del todo. Luego hay esa otra relación (por llamarle de alguna manera) en que no hay comunicación alguna. Lo cierto es que cuando acabó ni pensé en Facebook, hasta que de pronto un día, ahí estaba, había compartido algo. ¿Quitarlo? ¿Ahora? ¿Para qué? Tal y como son los hombres, en seguida se lo toman de manera que su ego suba como la espuma. No piensan "no quiere saber nada más de mí" sino "sigue coladita por mí y no puede soportar el verme ni en Facebook porque le duele". ¡Ay! De verdad que me impresiona la mentalidad masculina. Así que ahí están, para el resto del mundo somos amigos aunque ni me feliciten la Navidad ni se acuerden de mi cumpleaños. Quizás con el tiempo... ¡qué va! ¡A quién quiero engañar! Cuando a alguien no le importas lo más mínimo, no le importas y punto.

domingo, 3 de junio de 2012

El señor X

El sábado, cenando con dos amigos llegó la pregunta: ¿quién es el señor X del que has estado huyendo estos dos meses? No contesté. Se dice el pecado pero no el pecador. Sólo diré que es un mareante profesional. Un día es encantador y al día siguiente un cactus. Un día te envía 8 whatsapps geniales en 10 segundos y luego estás una semana sin noticias, silencio absoluto. A ellos les debe parecer que es una manera de hacerse los interesantes y que así nos tienen en vilo. Puede ser, pero no eternamente. Un ratito nos divierte el ¿dará señales de vida? ¿Me llamará para tomar algo? Pero pasado el tiempo esa actitud nos desespera y nos cansa. Y llegamos a lo que llegué yo: no quiero más juegos, sal da mi vida YA. Si te intereso de verdad sabes donde estoy y si no te intereso ¿te importa apartarte que me estás estropeando la vista? No es fácil, lo reconozco, sobre todo cuando el energúmeno en cuestión te gusta, pero hay que quererse un poco más y saber que si hasta ahora no ha dado ningún paso definitivo, nunca lo dará. Le estás entreteniendo mientras no encuentra otra cosa que le guste más. Estos son los típicos que, después de marearte durante meses, un día llegan y te dicen que se casan con una chica que han conocido hace tres segundos y a ti se te queda una cara de idiota... cuando a un hombre le interesas ya se asegura él de que no te escapes. Así que por eso decidí que el Señor X no me compensaba y para pasar página definitivamente desaparecí del mapa. Ahora que ya no tiene nada que hacer porque mi cerebro ya lo tiene en el archivo de "Ni muerta" puedo volver al mundo. ¡Y vaya si he vuelto!

martes, 29 de mayo de 2012

El cuento de la lechera

Ayer había sorteo del euromillón. ¡99 millones de euros! Entre unas amigas decidimos que no podíamos dejar pasar esa oportunidad. Como estamos un poco dispersadas (que bueno es el whatsappp para que eso no sea un problema) una se fue a comprarlo y nos pasó la foto con los números unas dos horas antes de que fuera el sorteo. Nos tocaban 11 millones por cabeza. No está mal ¿eh? Así que durante esas dos horas estuvimos imaginando qué haríamos con el dinero. Una quería comprar el restaurante en el que cenamos desde años cada vez que nos reunimos. Le quitamos la idea de la cabeza, celebrarlo ahí sí, pero ¿comprarlo? No nos acababa de convencer la inversión. Estuvimos planeando como recoger a las desperdigadas. Incluso montar una misión a los Ángeles de Charlie para recoger a una de nosotras que estaba encerrada en una reunión de trabajo. Finalmente llegó la hora y, evidentemente no nos tocó, sino no estaría en casa delante de mi ordenador contándoos esto, estaría en un avión rumbo a cualquier parte. Pero habíamos pasado dos horas tan buenas. Habíamos conseguido hacer reír a una de nosotras que está pasando un momento muy triste, a la de la reunión, se le pasó volando el tostón que estaba sufriendo y yo durante dos horas me olvidé que mañana tengo que hablar cuatro minutos seguidos en chino sin chuleta ni nada. Así que, aunque no tuvimos los números premiados, yo no diría que el cántaro se rompió. A veces no hace falta que te toque el dinero para que digas que te ha tocado la lotería. Creo que a nosotras ayer nos tocó.

domingo, 27 de mayo de 2012

Julito

Otra vez yo y los taxistas. ¡Qué manía tengo de coger siempre el que está más loco! El otro día llegué a la estación de Sants en Barcelona y cogí un taxi para ir a casa, bueno, el que me tocó... no te dejan elegir. Mientras él metía mi maleta en el maletero, yo entré en el taxi y oigo una canción de Julio Iglesias. Pensé (y recé) que fuera la radio y que cuando acabara esa canción pondrían a un artista totalmente distinto. El taxista se subió al volante y emprendimos el camino a mi casa. Mis plegarias no habían sido escuchadas porque cuando acabó la canción empezó otra... "Fuiste mía, sólo mía, mía, mía..." ¡Ay! Pero es que entonces el taxista empieza a pasar rápido la canción y yo ya estaba a punto de sonreír cuando suelta el dedo del "forward" justo en el estribillo, sube el volumen y empieza a cantar como si le fuera la vida en ello "lo mejor de tu vida me lo he llevado yoooooo" ¡Nooooo! Menos mal que de la estación a mi casa sólo dio tiempo a dos canciones más, que evidentemente llevamos a un volumen poco recomendable para la contaminación acústica. Me recordó a cuando era pequeña y mi madre nos llevaba al colegio en el coche y las "cassettes" eran o de Julio Iglesias o de José Luís Perales, o un mix de los dos. Con el tiempo, he de reconocer, me he reconciliado un poquito con Julito pero con Perales, lo siento, no puedo con él, me parece un hombre taaaan triste.

miércoles, 23 de mayo de 2012

TO DO list

El otro día en Barcelona me encontré a un exjefe mío. Le saludé y me preguntó qué tal estaba y si seguía en Madrid. Hasta ahí todo normal. Le contesté que sí, que seguía ahí y siguió preguntando ¿estás contenta? Otra vez le dije que sí. Y entonces soltó: "¡Ah! Me alegro, te has casado." ¿Eh? pensé yo. ¿Qué tendrá qué ver el estar contenta con el estar casada? Y le contesté que no, que no me había casado. Y entre sorprendido y divertido me dijo: "No piensas casarte". ¿Tan difícil es de entender? ¿Por qué a todo el mundo le sorprende? Me pareció una conversación muy rara para mantener con un exjefe, así que sonreí y me despedí. Fui al banco el otro día y el que me atendía tenía que rellenar una serie de datos sobre mí. Me preguntó DNI, dirección y estado civil (no me preguntó la edad cosa que agradezco pero me extraña). Le dije que soltera, y con una sonrisa de oreja a oreja, queriendo hacerme un cumplido, me dijo "todavia" como algo que iba a llegar seguro. Pero es que hay más, alguien a quien conocí hará un año me soltó algo parecido cuando me preguntó si estaba casada y le contesté que no. El soltó "Aún no". ¡No me lo puedo creer! Mi objetivo en esta vida no es casarme, ni siquiera está en la lista del "TO DO" y mira que ahí hay cosas raras (entre ellas subir a un camello que ya he hecho, he tachado, y es una experiencia que no pienso repetir) pero casarme, no, no está. Sé que no se puede decir de esta agua no beberé, y puede que algún día alguien consiga que supere mis ataques de pánico y me convenza (probablemente tenga que drogarme antes) para hacer el paseíllo al altar, pero mientras tanto, la gente debería aceptar que estar soltera es una opción tan válida como la de estar casada.

martes, 22 de mayo de 2012

Sí y no

A petición de un amigo iba a explicar cuando las mujeres queremos decir sí y cuando queremos decir no. Estaba ya en ello cuando de pronto me ha venido a la cabeza una expresión muy sabia: ¡Al enemigo ni agua! Vamos a ver ¿por qué yo les voy a facilitar las cosas cuando ellos no lo hacen? Y no quiero ni oír que ellos son simples y cuando dicen algo significa literalmente eso, porque no es cierto. Por ejemplo: ¿Cuántas de nosotras hemos estado pegadas al teléfono esperando que suene porque él se despidió con un "te llamaré" y la llamada nunca llegó? ¡Ah! Ese es uno de los grandes misterios del lenguaje masculino. Cuando vosotros expliquéis cuando un "te llamaré" significa eso y cuando significa "sayonara baby" puede que nosotras os demos alguna pista sobre el sí y el no. De momento, tendréis que seguir a ciegas. De todas formas, si nos escucharais un poquito, sabríais perfectamente lo que os estamos diciendo. Pero pedir a un hombre que te escuche es como pedir peras al olmo. Te oyen, pero escucharte, es decir, que el sonido que oyen vaya a ser descifrado por su cerebro, eso no lo hacen ni tienen interés en hacerlo. Así que ¡esto es la guerra!

La ameba

El domingo quedé con dos amigas para tomar un café. Me preguntaron por mi vida sentimental, a lo que contesté que era la misma que la de las amebas: inexistente. Una de ellas me dijo: pues ya es hora de solucionarlo, ¿no? Y la otra replicó que también va bien estar un tiempo sola. Así que estuvimos discutiendo sobre lo bonito que es encontrar a alguien y el más vale sola que mal acompañada. Era como estar en un debate, ellas dando su opinión y yo, como en un partido de tenis, moviendo la cabeza (y mis ideas) de un lado a otro de la pista. Supongo que ambas tienen razón, pero ¡uf! es que me da una pereza volver a empezar para llegar a que es cierto, mejor sola que mal acompañada, que creo que voy a seguir de ameba un ratito más. Al fin y al cabo, tampoco es que tenga una fila de fiches haciendo cola, esperando a que me decida. Más bien todo lo contrario. Así que vamos a seguir en mi fase antisocial y dejaremos que pase el verano (que es una época muy peligrosa) y en septiembre me replantearé volver o no a los ruedos sentimentales. Primero quiero recuperarme del todo de la última cornada.

jueves, 17 de mayo de 2012

Vocabulario femenino

El otro día me pasaron esto por email: VOCABULARIO FEMENINO 1. VALE: Esta es la palabra que las mujeres emplean para finalizar una discusión; cuando han decidido que ellas tienen la razón y ahora debes callarte. 2. CINCO MINUTOS: Si se está arreglando, significa media hora. Pero cinco minutos son sólo cinco minutos cuando te han concedido cinco minutos adicionales para terminar de ver el partido, antes de salir a ayudar con la compra. 3. NADA: Es la calma antes de la tormenta. Significa algo... Y deberías estar totalmente alerta. Discusiones que empiezan con nada, normalmente acaban con vale (ver punto 1). 4. NO HAY PROBLEMA: (También “adelante”, “hazlo” o “no, no me molesta”). Es un reto y no es darte permiso. Ni se te ocurra hacerlo... 5. GRAN SUSPIRO: En realidad, es una palabra pero, habitualmente, los hombres no la entienden. Un suspiro alto y claro significa que ella piensa que eres idiota y se pregunta por qué está perdiendo el tiempo discutiendo sobre nada (ver punto 3 para entender el significado de nada). 6. MUY BIEN: Esta es una de las expresiones más peligrosas que una mujer puede decir a un hombre. Significa que ella meditará cuidadosamente antes de decidir cómo y cuándo pagarás tu equivocación... 7. ES IGUAL: (También “tú mismo”). Es la forma femenina de mandarte a la mierda. 8. TRANQUILO, LO HE ENTENDIDO: Otra frase peligrosa donde las haya. Significa que aunque la mujer ha dicho al hombre en repetidas ocasiones que haga algo, finalmente, lo está haciendo ella misma... Los acontecimientos llevan al hombre a preguntar “¿qué pasa?”. Para saber la respuesta de la mujer, ver punto 3. Lo peor de todo es que es taaaaan cierto. Y además ellos no se enteran. Después de años y años (por no decir siglos) en los que las mujeres hemos estado utilizando las mismas palabras con el mismo significado, ellos siguen sin hablar el idioma. Es curioso, aprenden inglés, francés, alemán, incluso algún amigo mío está con el japonés, pero se niegan a aprender nuestro idioma, es decir, el que habla la mitad de la población mundial (más o menos, no sé como están las estadísticas demográficas en este momento) ¿Tan difícil es?

martes, 15 de mayo de 2012

Películas románticas

El sábado, cenando con unos amigos, empezamos a hablar de lo que opinábamos del amor. Todos tenían ganas de enamorarse, todos menos yo, claro, siempre tengo que llevar la contraria. Lo siento, pero dejar mi lado racional (que es el que en más estima tengo) por un hombre que no va a preciar mi sacrificio, no me apetece absolutamente nada. En fin, que una amiga decía que ella quería la película romántica y yo, que estoy un poco escaldadita, dije que no, que no quería eso. Entonces todos se quedaron sorprendidos: ¡Pero si eres una romanticona y te encantan esas películas! Que me guste verlas no quiere decir que quiera vivirlas ¿o es que los locos por el cine de terror quieren pasar una noche con Freddy Krugger? Me gusta verlas porque te dejan buen sabor de boca, pero seamos realistas, en esas películas después de 150 malentendidos y 200 meteduras de pata por parte de ella, él sigue colado y se presenta en su casa, trabajo, o reunión y le declara su amor incondicional. Normalmente en mi caso, ni siquiera superan mi primer ataque de pánico, y eso que incluso a veces, están avisados. Así que no, no espero que él llame a mi puerta, reconozca que ha sido un idiota y prometa ser el hombre perfecto el resto de su vida. Lo siento, pero no tengo tanta fe en ninguno de los hombres que conozco. A las pruebas me remito.

viernes, 11 de mayo de 2012

Preguntas y más preguntas

Hace dos meses tomé una decisión. Un poco drástica, lo reconozco, pero era necesaria. Una de las razones, que no la única, era que estaba harta de que la mayoría de mis amigos me preguntaran como iba la cosa, cuando la cosa no iba de ninguna manera. Además no podía más de las frases "es que no das pistas" o "le das miedo". ¿Qué yo doy miedo? ¡Ojalá! En fin, que cansada de todo esto decidí pasar página, tirar para adelante y no volver a mirar atrás. Lo reconozco, no está siendo tan fácil como pensaba. Al principio, con la fuerza de una nueva decisión tomada, todo iba bien, (como el lunes que decides empezar la dieta) pero a medida que han ido pasando las semanas, la fuerza ha ido desapareciendo (vamos que en la dieta estaríamos a viernes) y la verdad es que cada día me cuesta más seguir firme. Eso sí, el descubrir que tenía razón (y mira que esta vez no quería, hay que fastidiarse) ayuda bastante. Pero lo que no facilita nada las cosas es que la gente sigue preguntando. Esta vez la pregunta es "si sigo en mis trece". Y entonces vuelven las opiniones, entre ellas, que soy muy dura. ¡Por favor, no me hagáis reír! Con lo que he aguantado. Así que ¿podríamos no volver a hablar del "temita" en cuestión? ¿Es demasiado pedir?

domingo, 6 de mayo de 2012

Sevilla

Este año pasé el día de mi cumpleaños en Sevilla, en la Feria de Abril. Me invitó una amiga y mi prima estuvo encantada de acogerme como ocupa. Eso sí, lo primero que pregunté antes de aceptar la invitación fue si era imprescindible vestirse con traje de lunares y volantes. Cuando ambas me dijeron que no, busqué un billete de tren. Y es que tengo un sentido del ridículo altamente evolucionado y no me veía con la flor en la cabeza. He de reconocer que cuando estás ahí no te parece tan raro, pero en frío me pareció demasiado. Mi cumpleaños lo pasé entre rebujitos, gintonics y rumbas. ¡Ah! y un cantante que cuando vio que intentaba salir de la caseta en cuanto empezó a cantar el cumpleaños feliz, decidió ir nombrándome de tanto en tanto micrófono en mano. ¡Ay! Al final llegamos a un trato: yo bailaba unas sevillanas y el dejaba de darme la brasa (palabras textuales del susodicho). Yo cumplí mi parte y él la suya durante 24 horas porque al día siguiente volvió a la carga. Moraleja: no te puedes fiar de los hombres, sus buenos propósitos les duran lo que un caramelo en la puerta de un colegio. Por otra parte lo pasé en grande. La feria es agotadora, me costó tres días recuperarme, pero me reí muchísimo y lo bailé todo. Así que volví con las pilas cargadas y con fuerza para el mes de mayo, a ver si seguimos en mi tónica de sacarme de la cabeza al hombre que no me quiere y dejamos que entre a alguno que, como mínimo, me adore.

jueves, 19 de abril de 2012

Dos años más

El pasado fin de semana estuve en Barcelona y como se acerca mi cumpleaños ¡ay! mi madre decidió que lo celebráramos el sábado porque venía mi hermano con la familia a comer. Todo era muy típico, me dejaron escoger el menú y en el postre apagaron las luces. Cual es mi sorpresa cuando miro el pastel y veo que el número de las velas no es el correcto. En vez de cumplir un año más, cumplía DOS más.¡Aaaaarrghhh! Cuando solté ¡yo no cumplo eso! mi madre se quedó blanca. "¿Cómo qué no?" "¡No! Cumplo uno menos". No me podía creer lo que estaba pasando. A estas alturas mis sobrinos ya estaban muertos de risa y el mayor cambiaba el orden de las velas (cuyo número era muchísimo peor) diciendo: ¿así te gusta más? Yo que a los 18 dije que no cumplía ni uno más, no he tenido más remedio que resignarme a que no lo acepten y me pongan un número más cada año pero ¡dos! eso es demasiado. Saltarme un año a estas edades no tiene ninguna gracia.
Eso sí, en casa, enseguida sacaron el lado práctico, las podremos aprovechar el año que viene. Para que luego digan que no nos apretamos el cinturón.

martes, 17 de abril de 2012

Maletazo

El miércoles en el tren me cayó una maleta en la cabeza. Iba yo tan tranquila en mi asiento, contenta porque no me había tocado nadie al lado cuando el Ave para en Zaragoza y se sube un petardo que tiene el asiento de al lado. Yo, como iba concentrada en la película, era Tintín, por cierto, que no la había visto y decidí que como "conozco" al actor y me quedaban más de dos horas de viaje iba a ser mi entretenimiento(bueno, no es el actor pero podría haberlo sido por el increíble parecido que tienen). En fin, que ahí estaba yo, concentrada cuando ¡pam! me cae algo en la cabeza. ¡Era una maleta! El energúmeno empezó a decirme que lo sentía, que se le había resbalado, etc. Yo le contesté bastante enfadada, pero no sólo por el golpetazo en la cabeza sino porque mira que es grande el tren, que hay vagones de turista y que hay asientos y me tiene que tocar a mí el patoso de turno. Eso creo que es lo que me puso más furiosa. Además, si al menos el maletazo me hubiera aclarado las ideas, pues mira, algo es algo, pero no, lo único que conseguí fue un chichón y un dolor de cabeza durante el resto del día. Además de sentirme la mujer más gafe del mundo, claro.

miércoles, 11 de abril de 2012

Mi isla

Ya he vuelto después de unos días de relax absoluto. Pensé que volvería con las pilas sociales cargadas, pero no. Sigo queriendo quedarme en mi isla. Para complicar las comunicaciones no he puesto aeropuerto. Sólo hay un pequeño embarcadero a las que llegan simplemente las pequeñas barcas a remo. Sí, sí, quien quiera llegar hasta aquí, va a tener que remar un rato. Estoy cansada de poner facilidades, me siento que doy la mano y me cogen hasta el hombro. ¡Se acabó! Además se está tan bien en esta playa desierta, tan tranquila y sobre todo tan segura. La puerta está cerrada con candado y he tirado la llave al mar. Además he puesto una alambrada electrificada, así que una vez has remado, hay que trepar, y tener cuidado con las descargas eléctricas. Ya pasada la alambrada hay que esquivar a los pastores alemanes. Están entrenados para atacar a cualquier extraño que entre en mi propiedad. Si consigue ganárselos y que le dejen pasar, sólo le queda buscarme, estoy escondida en alguna parte de esta isla. Y estoy tan a gusto que va a ser muy difícil moverme.

martes, 3 de abril de 2012

Tic tac, tic, tac

En 24 horas estaré rumbo al aeropuerto, por fin. Tengo tantas ganas de llegar y ver el mar, abstraerme en una novela de 1.000 páginas, de esas que te enganchas y no puedes soltar hasta que llegas al final. Literariamente no suelen ser gran cosa pero son muy entretenidas. También tengo ganas de sacar a Matilda. Matilda es mi bici, le iba a poner Lola pero alguien me fastidió el nombre (es una historia que os contaría pero no me apetece absolutamente nada recordarla). Pues Matilda lleva encerrada en el garaje desde agosto así que habrá que sacarla de paseo si no quiero que se oxide. Probablemente no haga buen tiempo, nunca lo hace en Semana Santa, pero me da exactamente igual, lo que quiero es salir de aquí, de la meseta, de una vez. El fin de semana he estado fuera y me ha sentado taaaan bien. Además el no estar en Madrid colabora muchísimo con mi decisión de sacar a alguien de mi cabeza y abrir los ojos a mi alrededor. Sólo 24 horas más y estaré a salvo. Tic tac, tic tac.

jueves, 29 de marzo de 2012

Empiezo a ver

Después de tomar la decisión de alejarme del mundanal ruido, por fin empiezo a ver sus frutos. Ayer, al volver de una comida, un vecino, al salir del parking, casi me atropella. Me llevé un buen susto pero cuando lo miré y vi lo guapísimo que era, encima me puse colorada. Como si tuviera quince años, igual, es que no hay manera de controlarlo. Me sonrió divertido y a mí se me subieron aún más los colores, pero seguí mi camino lo más dignamente que pude y él el suyo. Llevo siete años viviendo en el edificio y jamás lo había visto ¿por qué? Pues porque iba sin mirar. Esta tan obcecada que el resto del mundo desaparecía a mi alrededor. Evidentemente, un hombre que sin ni siquiera conocerme haya intentado atropellarme no tiene muchas posibilidades, pero lo que me tiene muy contenta, es que lo he visto. Llegué a casa muy satisfecha de mí misma y de mi decisión. He de reconocer que tomarla no fue fácil y que aún hay días que me cuesta, pero cuando tomas una decisión es para llevarla a cabo en serio y ver a donde te lleva. Yo me equivoco bastante y muchísimas veces tengo que volver hacia atrás, pero me parece que ésta es la acertada. ¡Yupi!

miércoles, 28 de marzo de 2012

Vorrei Mangiar la Nutella

Hace unos fines de semana una amiga me dice que si me apetece ir a un concierto a un bar de un italiano guapísimo. Le dije que vale, ahí que fuimos. Llegué justo cuando empezaba. De lo primero que me di cuenta fue que nunca nos pelearíamos por un hombre. El chiquillo era atractivo pero de ahí a guapísimo, no sé yo. Empezó el concierto. Como aún no es muy conocido, además de sus canciones, canta las de otros, que no me molesta, al contrario, sino no hubiera conocido ni una, pero lo que me sorprendió es con la canción que empezó: Simply the best de Tina Turner. ¡Es un valiente! Pudiendo haber optado por Alejandro Sanz o cualquiera de esos cursis (con todo el respeto, que alguna que tengo en mi ipod) no, no, el señor se atreve con Tina Turner. En fin, que estuvimos recordando grandes éxitos de los 90 y algunos más cercanos. Llegó un momento en que mi amiga me dijo: a ver si canta su canción "Vorrei mangiar la nutella". Yo creí que no lo había entendido bien debido a la música del bar y no le hice demasiado caso, cuando de pronto, empieza una musiquilla y un montón de niñas de veintitantos empiezan a gritar y a saltar (el chico tiene su club de fans, no creáis que es un cualquiera) y cual es mi sorpresa que sí, que el estribillo con música pegadiza dice exactamente eso: Vorrei mangiar la nutella. En fin, no sé italiano, pero algo pillo, resulta que es una canción de amor. Flipante. Evidentemente, con el título, os podéis imaginar que va dirigida a eso, a su club de fans de veintitantos. Aunque tiene alguna de la treintena, mi amiga, por ejemplo. Yo, lo siento, no le he pillado el punto.

lunes, 26 de marzo de 2012

Hay más peces en el mar

El mar está lleeeeno de peces pero cuando estás obcecada en un pez en particular, no verás nada más. También es verdad que cuando no ves a "ese" pez y descubres el resto de la fauna marina, tiendes a fijarte en los besugos, lo que no ayuda a que cuando te has dado cuenta de eso, de que es un besugo, no vuelvas al pez original. Y ya estamos otra vez en lo mismo, perdiendo tu maravilloso tiempo intentando que él se de cuenta de que existes. Si aún no se ha enterado es porque no le interesa lo más mínimo hacerlo. Una cosa es cierta, cuando le interesas a uno, él insiste. Sí, sí, no existe el hombre tímido, es un cuento que nos hemos inventado para no sentirnos rechazadas. Tampoco existe el que cree que no es suficientemente bueno para ti, el ego masculino no permite esa creencia bajo ninguna circunstancia, tampoco te creas la frasecita "no eres tú, soy yo"... en fin, miles de excusas para no decir claramente que no le gustas. Por lo que no hay que dejar pasar el tiempo esperando una señal que si no ha llegado aún es evidente que no llegará. Más vale que te tires al agua y nades un rato, a ver si ves algún delfín, que esos son los buenos.

jueves, 22 de marzo de 2012

Aburrida

No, no estoy aburrida, lo que estoy es harta. Ya no puedo más de la meseta, necesito playa. Sólo quedan dos semanitas, un poco menos, y estaré en un avión rumbo a Ibiza. Lo poco que aguanto coger aviones lo compensa el destino. ¿Para cuando un eurostar de turno para las Baleares? Lo sé, no está el país como para ponerse a hacer obras faraónicas de este tipo pero me gustaría taaaaanto.
Eso sí, mi dermatólogo me ha prohibido terminantemente tomar el sol. ¡Malditas pecas! Pero yo creo que exagera porque como sabe que lo voy a tomar igual, a ver si con esa amenaza del melanoma me pongo un poco más de protección. De todas formas no hay que preocuparse porque en Semana Santa siempre hace mal tiempo. Para el verano, ya veremos.
En fin, que mientras cuento los días que quedan me ha dado por alejarme del mundanal ruido y ¡de qué manera! Esta vez sí que va en serio. Estoy en esos momentos antisociales que me dan de vez en cuanto y que se curan en cuanto salgo de aquí. Ya queda menos. Tic, tac, tic, tac.

martes, 20 de marzo de 2012

Timidez

El otro día mi timidez y mi afición a montarme una película me jugó una mala pasada. Todo empezó cuando un amigo me contó que alguien le había pedido mi teléfono pero, conociéndome a mí y los antecedentes con esa persona (sufrí un ataque de pánico de los sonados) decidió que sería más suave si le daba mi email.
Cual es mi sorpresa que al salir del tren en Atocha me lo encontré, allí estaba después de más de 10 años sin vernos (he de decir que estaba igualito, igualito). Estaba esperando a alguien. Él no me vio a mí y yo seguí mi camino sin dejar de pensar si debería acercarme a saludar o no. Entonces mi imaginación se hizo la dueña de mi mente, empecé a elucubrar. Vamos a ver ¿quién va a esperar a una estación? Pensé que debía estar esperando a su novia o peor aún, a su mujer. Pero entonces ¿por qué le pidió mi email a ese amigo común? ¿Y por qué no lo ha utilizado? Pues porque tiene novia, seguro, seguro. Toda esa película me iba yo montando cuando llegué a la parada de taxis. Había muchísima cola, así que mientras esperaba que llegara mi turno, iba vigilando lo que pasaba ahí abajo, dentro de la estación (quiero dar las gracias al arquitecto de la terminal de llegadas de Atocha por hacerlo de un cristal nítido y transparente). El seguía esperando, ya no quedaba nadie más y lo veía como hablaba por teléfono. "Je, je, je, te han dado plantón" pensé "eso te pasa por ir pidiendo emails por ahí teniendo novia".
De pronto vi que por fin recibía a alguien ¡A su madre! Me sentí fatal y muy, muy mala persona. Siempre mirando el lado positivo ¿eh? En fin, por fin llegó mi turno y me subí al taxi mientras seguí mirando por la ventanilla. Hasta que me di cuenta que alguien me estaba mirando: era el taxista, esperando que le diera la dirección. Lo siento, le dije, hoy estoy muy distraída. Y me llevó a casa.
Lo sé, debería haberme acercado y decir hola y no debería haber sido tan mal pensada, pero el también podría haberme visto ¿no?

jueves, 15 de marzo de 2012

Quiero ser una tortuga

Me gustaría ser una tortuga, cuando te apetece desaparecer o no te gusta lo que ocurre a tu alrededor, te metes enterita dentro del caparazón y a esperar que pase la tormenta. Además no es como la avestruz que mete la cabeza en la arena pero el resto del cuerpo sigue a merced de los golpes. No, la tortuga es más lista, mete todo su cuerpo en su caparazón que es bastante duro así que los golpes rebotan.
Tranquilos, no me ha pasado nada, no es que en este momento quiera desaparecer. Pero me he dado cuenta que cuando preguntas a la gente que animal le gustaría ser, contestan que un tigre o un león o cualquier animal fuerte y grande. Yo, en cambio, prefiero ser tortuga, va lenta pero segura (que al final ganó a la liebre) va por tierra y por agua, así que significa que es bastante adaptable al medio y además me encanta el sistema de protección que le ha dado la naturaleza.

miércoles, 14 de marzo de 2012

El amor no es racional

Hace unos días fui a comer con un amiga con la que acabé hablando de mi vida sentimental, para variar. Si es que es el tema favorito últimamente. Lo cierto es que tenía novedades así que, como hacemos siempre las mujeres, estuvimos analizando cada pequeño detalle para llegar a la conclusión de que no hay quien entienda a los hombres. Son una montaña rusa emocional, ahora me encantas, ahora te ignoro, ahora subidón, ahora caída en picado. Pero a lo que iba, cuando ya nos despedíamos me suelta la frasecita "el amor no es racional". A parte de que a mí me parece eso una cursilada, también creo que es una mentira y de las gordas. ¡Claro que puede ser racional! Y debería serlo más. Menos disgustos tendríamos.
Yo misma, si al "último" lo hubiera analizado un poquito más antes de lanzarme a la piscina, no me hubiera ni acercado, pero cansada de que me dijeran que no me dejo llevar, decidí ser impulsiva por una vez, y ya veis, me llevé un chasco, que para que recordarlo. Así que voy a volver a sacar mi lista de pros y contras antes de lanzarme a otro desastre. Lo sé, es frío, pero hay que aprender de la experiencia y de tus errores para no repetirlos, que dicen que eso es de sabios.

lunes, 12 de marzo de 2012

Un respiro ¡por favor!

No puedo esperar a que llegue Semana Santa y coger un avión a Ibiza para desaparecer un rato del mundanal ruido. Últimamente no hago más que llevarme chascos. EL otro día tuve que aguantar las impertinencias y la mala educación de una persona que ya no me caía bien, pero es que ahora la he enviado a la categoría "cretina". Y no hay tanta gente ahí, no os creáis que es tan fácil, pero cuando digo basta, digo basta, y agradecería mucho si no tengo que cruzarme con esta persona en el fututo más de lo estrictamente necesario.
Por otro lado, hay una persona que cada vez que estoy a su lado me siento la mujer más fea del mundo. No soy Kate Moss pero de ahí a sentirme horrorosa va un trecho. ¿Por qué me siento fea? Pues porque sé que le caigo bien, que le hago reír, que me considera buena persona y además lista pero jamás de los jamases ha intentado ni el más mínimo roce. Conclusión: el problema es físico.
Finalmente, para acabarlo de arreglar, la espalda me está matando y tengo una rodilla destrozada.
¿Veís porqué necesito aislarme unos días? Tengo que recuperar la autoestima que está por los suelos.

martes, 6 de marzo de 2012

FICC 2012

El First Interantional Cocktail Contest tuvo lugar hace un par de semanas. Parece super serio ¿a qué sí? Pues no, fue una competición entre cuatro amigos a ver quien hacía el mejor cóctel. Elegimos a un jurado que tenía que valorar nombre, presentación y sabor. Resulta que además de comer, también bebemos por los ojos. No quiero menospreciar el trabajo del ganador, se curró mucho el color del cóctel (negro) el nombre, Whitney's last kiss (se aprovechó que estaba recientemente fallecida para llegar al corazoncito del jurado) y además supo sacar partido de las cosas a su alrededor (cogió dos candelabros de la mesa de mi comedor que le fueron que ni pintados). Creo que ha quedado claro que no gané yo, y sí, lo podéis añadir, tengo mal perder, muy mal perder.
Lo importante es lo bien que lo pasamos. Semanas antes con mensajes y luego en mi cocina preparándolos. El resto fue lo de menos. No me creéis, y lo entiendo, no me lo creo ni yo. Que no, que no, que lo importante no es participar... es ganar!!
¡Bien! Ya he sacado esa vena competitiva mía que no sale nunca y que dicen que es incluso sana. A mí no me lo parece pero por hacer un poco de caso a esos que no pueden dormir cuando pierden. Yo dormí como una bendita. El cóctel ganador era un espectáculo verlo (que no beberlo....).

jueves, 1 de marzo de 2012

Insensibilidad o torpeza

Hay hombres que son tan sensibles como un hipopótamo o lo que es aún peor, torpes como elefantes en una cristalería. Sí, sí, entran a lo bestia, sin mirar que hay cristales a su alrededor, lo rompen todo y encima se sorprenden cuando se cortan.

El sábado me di cuenta de que alguien que creía conocer, era insensible como un hipopótamo o torpe como un elefante, está por decidir. Me llegó un email que no debía haber recibido y fue por una de las dos siguientes causas: insensibilidad o torpeza. Torpeza porque no revisó la lista antes de enviarlo. Era un email general, de esos en los que estás en copia oculta. O insensibilidad porque lo hizo a conciencia. Una forma de decir "sigo aquí" aunque sea virtualmente. Mis amigos opinan torpeza (y estoy de acuerdo) mis amigas insensibilidad. ¿Cómo podemos tener reacciones diferentes a un hecho concreto? Así nos va, no tenemos ni idea de como leer las señales que nos envía el sexo opuesto. Mis amigas quieren creer que aún hay sentimientos por su parte, cuando yo dudo que los hubiera en algún momento (vale, me estoy pasando, puede que algo sintiera durante unos segundos aunque no llegó al minuto). Mis amigos, que conocen a los de su género, creen que ni siquiera se planteó que yo estuviera todavía en esa lista. Lo que me parece mucho más probable.

Pero no quiero generalizar, no todos son hipopótamos ni elefantes, los hay buitres, tiburones, también ositos de peluche (¡puagh!) y así podría seguir hasta el infinito.

lunes, 27 de febrero de 2012

Fiesta de solteros

Hace unos fines de semana fui a una fiesta de solteros. Fui totalmente engañada. Había quedado con una amiga para ir a una inauguración de un espacio de artistas. Otro amigo nos acompañó diciéndome: "luego podemos ir a la inauguración de un nuevo local. Una amiga mía está colaborando en el evento. Será divertido." Le dije que sí. Cuando llegamos al lugar nos recibió la que "colaboraba en el evento" (que no era otra que una de las organizadoras), mientras mi amigo se detenía en la entrada. Lo primero que nos dijo fue: "bueno chicas, esta es una fiesta para conocer gente, así que si se os acerca alguno en la barra, hablad con él". ¿Cómo? ¡Ay! Sonreí y decidí que ya tenía toda la información necesaria. Volvió nuestro amigo. ¿Tú sabías que esto era una fiesta de solteros? Me mira y me dice: "sí, es que cuando ella (por la de la puerta) me pide que vaya a algún sitio no me puedo negar, es tan encantadora..." Ya, ya, todo eso está muy bien, tu no puedes decir que no, pero me gustaría tener la oportunidad de decidir por mí misma. Yo, para acabarlo de arreglar, me había puesto una minifalda y taconazo por lo que encima parecía que iba pidiendo guerra. Si en realidad, yo le hubiera acompañado aún sabiendo a lo que iba, pero definitivamente me hubiera vestido sin enseñar pierna. Ya la gota que colmó el vaso fue cuando le expliqué lo de "la barra" y su respuesta fue: "Ah, no, ni se os ocurra". Hay que fastidiarse. No es que tuviera ningún interés especial pero que te lleven a una fiesta de solteros sin poder formar parte de ella, ya me parece un absurdo.

jueves, 23 de febrero de 2012

¡Qué ataque más gratuito!

Comiendo la semana pasada, un amigo mío, queriendo explicar mi vida sentimental a una chica que acababa de conocerme, la definió de esta manera: "es la pera, no quiere saber nada de citas, le montas comidas y nada, o cenas y tampoco nada, no quiere ni oír hablar del tema. Los tiene ahí esperando y ella no les hace ni caso". ¿Cómoooooo? En fin, primero de todo, no entiendo la necesidad de explicar a una perfecta desconocida mi terrorífica vida sentimental. Que sí, que me cayó muy bien, pero no creo que en una hora (que era más o menos el tiempo que llevábamos sentadas en la misma mesa por primera vez) tengamos la confianza suficiente como para hablar de algo más que del tiempo. Y segundo, eso es como le dije: un ataque totalmente gratuito. Yo no los tengo "esperando" en ninguna parte, es más, si en este momento hay alguno interesado en mí, más que esperando, está más escondido que el propio Wally. Si no acepto "citas" es porque cuando las acepté me llevé más de un chasco y tuve que pasar por más de una escena peculiar. Recuerdo la última en la que literalmente salí corriendo. Sí, sí, hasta ese día no me había dado cuenta de que podía ganar las olimpiadas en carreras sobre tacones, si se dignaran a reconocer eso como deporte. Pero he de decir que cómo he decidido convertirme en mujer fatal, puede que sí que acabe teniendo cola en la puerta de casa. Ya veremos.

martes, 21 de febrero de 2012

Segunda mano

Hace un par de semanas cené en casa de unos amigos. Es un matrimonio muy divertido en el que él cocina de muerte. Cenamos cinco y estuvimos hablando de todo un poco. De pronto, ella dijo que había encontrado la manera de deshacerse de esos miles de cachivaches que con el tiempo van amontonándose en el armario. Y entonces habló él. "Cuentales lo último que vendiste en Segunda Mano". "Que no, que no". "Sí, sí, anda, que encima de que te haces llamar Mari, les das mi móvil. La primera vez que me llamaron preguntando por Mari les dije que se equivocaban pero insistieron diciendo que llamaban por una anuncio de Segunda Mano y entonces caí que mi querida "Mari" había dado mi número en vez del suyo". Ella se resistía a decirnos lo que había vendido, decía que le daba mucho corte, pero insistiendo lo soltó. ¡Había puesto a la venta un sacaleches! Y lo mejor de todo ¡Lo había vendido! Cuando vio que una ucraniana estaba interesada y parecía que lo iba a comprar en serio, a ella le remordió la conciencia y le dijo: ¿sabes qué está usado, no? He tenido 4 hijos. La ucraniana contesto: tsi, tsi, entiendo que tsi tse vfende en segunda mano ess porque essta ussado. Y no solo lo compró sino que además fue a buscarlo. Definitivamente no hay que tirar nada.

martes, 14 de febrero de 2012

14 de febrero

Son sólo las 9 de la mañana y ya estoy con urticaria de tanta cursilería. No se puede ni poner la radio que ahí está San Valentín con todo lo que ello conlleva: una pesadilla. No recuerdo el último día de los "enamorados" que celebré. Creo que debía tener 17 años o algo por estilo, pero si algo he de agradecer a TODOS con los que me he encontrado en esta vida, era que, como yo, no soportaban este día. A algunos es lo único que les puedo agradecer, pero en fin, algo es algo.
Mira que me gusta que me mimen, en realidad, que me malcríen, pero que me regalen rosas porque El Corte Inglés así lo manda me saca de mis casillas. Además no me gustan las rosas rojas, seré rara, pero es así. Me parece que están tan vistas que empiezan a ser vulgares. Tooooodo el mundo las regala, con la variedad de flores que hay en este mundo, e incluso, si quieres regalar rosas, ¡será porqué no hay más colores!
Bueno, ya he despotricado un poquito, un día como hoy lo necesito. Ahora, más relajada me voy a mi clase de chino. Zài jiàn!

lunes, 13 de febrero de 2012

He vuelto

Vuelvo a ser yo. Aunque algunos amigos míos sé que no van a celebrarlo, yo estoy muy, pero que muy, contenta. Después de un tiempo de tinieblas dónde no tenía ni idea cuál era la actitud adecuada ante la vida y probando distintas metamorfosis de mi forma de ser, he llegado a la conclusión que dónde me siento más cómoda es siendo yo misma. Es decir, que se acabó la buena, se acabó el vamos a dar una oportunidad y sobre todo se acabó la paciencia de santa. Lo siento mucho pero no pienso dar pistas, no tengo intención de dejar las cosas claras a preguntas que no lo son tanto y sobre todo, no voy a callarme por mucho que le duela al de enfrente. Ya está bien de tanta tontería. Me he dado cuenta de que el resto de la humanidad no es tan considerada conmigo así que ¿por qué iba a serlo yo?
Lo sé, puede que eso no me lleve a ninguna parte, pero ¿quién ha dicho que yo quiero ir a algún sitio? Con lo bien que estoy ahora. Haciendo lo que quiero, entrando y saliendo sin tener que dar explicaciones a nadie y sobre todo sin ese miedo atroz a caerme por el precipicio. No hace tanto tiempo que conseguí salir del barranco como para volver a pasear por el borde. No, no y no. Me niego. Necesito volver a tener la tranquilidad que me he ganado a pulso.

miércoles, 8 de febrero de 2012

Cuando el novio de tu amiga es un cretino

Hay situaciones en que te cuesta encontrar la manera adecuada de actuar. Una de ellas es cuando una amiga tuya sale con un perfecto impresentable. ¿Qué haces? ¿Actúas como amiga sincera y le dices que estás harta de ver como le trata su novio? ¿O haces de hipócrita y sonríes con cara de circunstancia cuando lo tienes delante? ¡Aaaaahhh! ¡Qué dilema! Yo hace tiempo que opté por no opinar, en vez de eso intento hacer la pregunta adecuada en el momento oportuno.
El otro día una amiga me llama y empieza a despotricar del cretino de su novio (sí, sí, es un cretino, si os dirigís al Diccionario de la Real Academia Española veréis que en la definición de cretino han añadido una foto de su cara para que no haya dudas). A lo que iba, resulta que habían discutido. ¿Te compensa? le pregunté. ¿El qué? contestó ella, claramente queriendo negar lo evidente. No sé, las peleas, por ejemplo, le comento. Hija, (y ahora añadir el tonito maternal de quien cree estar hablando a la ignorancia personificada) en todas las parejas hay roces. No si encima he de aguantar lecciones, lo que hay que hacer a veces por las amigas. Como no quiero entrar al trapo y decirle que lo suyo no son roces sino canciones de Pimpinela, le contesto, bueno, si te hace feliz, a mí ya me va bien. Y esta es mi actitud hacia el problema. Ésta y el intentar evitar encontrarme con el "queridísimo novio", claro, porque aún no he conseguido que no se me note en la cara lo "genial" que me cae.

martes, 7 de febrero de 2012

Si no te va a gustar la respuesta...

No preguntes si no sabes si te va a gustar la respuesta. Es un dicho que me parece muy sabio. En cambio mis amigos parecen totalmente ignorantes de esta máxima. Pregunta, lánzate, ten una conversación... sí, sí, pero es que yo SÉ cual es la respuesta y también sé que no me va a gustar, así que si no os importa me quedo como estoy. Porque aunque a veces tenemos muy claras las cosas y parece que no pasa nada porque además nos las digan, no es cierto, sí que pasa si las oímos en voz alta. Duele. Aunque tú ya lo tuvieras totalmente asimilado, el que te lo digan con todas las letras es como una patada en el estómago. Así que no, después de pensarlo mucho(no creáis que no escucho los consejos bienintencionados) he decidido dejar las cosas como están, porque están bien, no perfectas, pero bien, y para mí ya es suficiente. Además, ¡qué manía con hablarlo todo!

miércoles, 1 de febrero de 2012

Mi rinconcito

La semana pasada iba en el autobús cuando entró un chico guapísimo. El jueves, cuando volví a coger el autobús a la misma hora lo volví ver y pensé "mira que mono". Y ayer otra vez. Entonces me di cuenta, no es que de pronto ese chico cogía el mismo autobús que yo, es que hasta ahora mismo no miraba a mi alrededor. Parece ser que he vuelto al mundanal ruido. ¡Noooooo! Estaba tan bien en mi rinconcito, tan tranquila y tan segura que no sé porqué he decidido salir. Debe ser que ya estoy completamente recuperada de mi último castañazo sentimental. Qué bien ¿no? Pues no, porque eso significa que vuelvo a ser carne de cañón para el siguiente tortazo y la verdad, no me apetece. Sí, sí, tortazo limpio porque nunca me he caracterizado por mi buen ojo en cuanto a hombres se refiere, y dudo que haya cambiado en los últimos meses. Aunque siempre creo haber aprendido la lección y me digo a mí misma, esta vez vamos a poner un filtro más contundente, llegado el momento, ni me acuerdo de la lección ni pongo filtro alguno. Así me va. Por lo que voy a ver si me pongo una venda en los ojos para no ver nada o vuelvo a mi rinconcito donde siempre estoy tan bien.

miércoles, 25 de enero de 2012

Blade runner

Estas navidades me han regalado un disco duro ya grabado con un montón de películas y series. Después de varios fiascos intentando conectarlo, por fin un amigo me dio el cable que necesitaba y lo conecté. Entre el amplio repertorio estaba Blade Runner y como hacía siiiiiglos que no la veía, pensé que sería un buen plan para un lunes por la noche. Recordaba que en su momento me gustó.
La película es de principios de los ochenta pero está ambientada en un hipotético 2019. Cuando vi lo que nos esperaba dentro de 7 años quise llorar. Primero de todo las ciudades son oscuras y caóticas y los apartamentos de los distintos personajes son para enviar una brigada de limpieza capaz de sacar un poco de lustre a tanto polvo y tanta mugre.
Pero vayamos a lo tecnológico que ahí hay tela. Harrison Ford habla con una computadora para aumentar las imágenes de una fotografía, hasta ahí bien, más que posible, pero cuando pide imprimir un detalle y por una impresora sale una polaroid mi asombro no tiene límite. Quién iba a decir en 1982 que la máquina polaroid sería un objeto de colección en 2012... No hace falta decir que en la película no hay un móvil y mucho menos un iphone o una blckberry. ¡Menudo visionario el guionista! Eso sí, existe un secador que es como una lámpara donde metes la cabeza y en medio minuto tu pelo está seco. ¡Lo quiero! ¡Lo necesitoooo!
Finalmente, lo que realmente me deprime es que en 2019 vuelven las hombreras, ¡aaargggh! Por favor, aún estamos a tiempo de evitar semejante desastre, así que pido seriamente al mundo de la moda que bajo ningún concepto se planteen volver a un error tan antiestético.

lunes, 23 de enero de 2012

Partido de fútbol

Ayer, por primera vez me llevaron a un partido del fútbol. Nada menos que al Bernabéu. Jugaba contra el Atlético de Bilbao, menos mal, si llega a jugar contra el Barcelona me linchan, ahí no habría podido disimular. Pero como era contra otro equipo y no soy ninguna fanática, fui con el equipo del que generosamente me había invitado.
He de reconocerlo, lo pasé como una enana. A mí, que el fútbol me trae sin cuidado y que sólo veo los partidos cuando quedamos en un bar por el simple hecho de que es un plan. Incluso, el miércoles por la noche, mientras yo estaba absorbida por Downtown Abbey, sonó el interfono. Era un periodista de Intereconomía que quería saber si estaba viendo el partido. ¿El partido? No, no, no. ¿Quién juega?, le pregunté. Sorprendido, si acabar de creerse que lo preguntaba en serio, me contestó: Real Madrid - Barcelona. ¡Vaya! Que eso es lo que me entero yo del fútbol.
Pero he de decir que ir al campo es totalmente distinto. El ambiente, las pipas (¡puagh!) Pobre al que luego le toca la limpieza. La señora de atrás de 100 años, de los cuales lleva 70 sentada ahí, gritando "¡Sinvergüenza!" y declarando su amor incondicional a Marcelo... la tensión... ¡ufff! ¡Qué nervios pasé!
Eso sí ganamos. Sí, sí, digo ganamos que ayer yo iba con el Real Madrid. ¡Quién me ha visto y quién me ve!

lunes, 16 de enero de 2012

Mamma Mía

Me he reconciliado con Abba. No sé porqué pero le tenía muchísima manía. El domingo pusieron Mamma Mía en Telemadrid, ya la había visto en el cine. ¿Qué porqué fui a ver una película que sabía perfectamente que era un musical de un grupo que detestaba? ¡Aaaahhhh! Es que Pierce Brosnan era uno de los protagonistas, y a eso no me puedo resistir. En fin, que fui a ver la película, me deleité con los primeros planos y salí pensando que no estaba mal pero que tanto Abba era un poco cargante. Pero este domingo, volví a verla ¿Por qué? Pues por lo mismo que la vez anterior. Las películas de este hombre puedo verlas millones de veces y no me canso. Y esta vez fue distinto. Cuando acabó la película me fui a dormir contenta. Es una de esas películas que te dejan buen sabor de boca como "Love Actually" o "Mucho ruido y pocas nueces". No estoy comparando calidad, estas dos le dan cien patadas, pero te deja la misma sensación. Eso no significa que ahora vaya a ir corriendo a adquirir tooooda la discografía de Abba. De hecho no pretendo llevar ni una canción en mi Ipod. Pero mira, ya no les tengo tanta manía.

Fideuá

El sábado fui a comer a casa de un matrimonio amigo mío. Ella había preparado una buenísima fideuá, pero recordó que era lo que me había dado la otra vez que había estado comiendo ahí. A mí no me importó nada porque es un plato que me encanta y, la verdad, no tengo ni los conocimientos ni la paciencia culinaria como para preparármela yo. Estuvimos hablando de todo, absolutamente de todo, para que lo veáis claro: hablamso tanto del tema "Urdangarín" como de "Dartacan y los tres mosqueperros" (sí, sí, va en serio, hablamos también de eso). Resulta que volviéndola a ver te das cuentas de lo muchos detalles que se te pasaron cuando la veías de pequeña. También me enseñaron unos vídeos divertidísimos de la revista EL jueves sobre la moncloa. Son geniales, os los recomiendo.
Después él nos preparó un buenísimo gintonic. Creo que le pone cardamomo o algo parecido. De tanto en tanto, él intentaba sacar el tema de mi vida sentimental pero no llegó muy lejos y de pronto me dice que se ha enganchado a mi blog. Y añade que alguna vez le gustaría reconocerse, es decir, que hablara de él. Me entró la risa pero le prometí que hoy hablaría de él así que lo prometido es deuda. Estuvo muy gracioso, ya antes de irme, volvió a insistir y me dijo: mira voy a hacer una flexión, sólo una, para salir en tu blog. Y dicho y hecho, hizo una flexión en el suelo. Sólo una, como había dicho.

miércoles, 11 de enero de 2012

Sugerencias

Siguiendo mi post de ayer os paso a explicar en que derivó la conversación. Según este amigo mío tengo que poner de mi parte para encontrar a alguien "normal" (palabra cuyo concepto ya discutí).
La primera sugerencia fue que me apuntara al gimnasio DIR. Cuando le dije que yo ya estaba apuntada al gimnasio, me contestó que eso daba igual, que me apuntara a éste también. Por lo visto, dicho gimnasio organiza fiestas para sus socios en la terraza de un hotel de Barcelona. Lo siento, le dije, pero no hay DIR en Madrid, al menos cerca de casa. "Pues te apuntas al de Barcelona y vienes cuando haya una fiesta, es para conocer gente nueva, el ejercicio lo haces en el tuyo de Madrid". ¡Claro! Cómo que están los tiempos para ir pagando dos gimnasios. Además apuntarme a uno para ir a fiestas me parece muuuuy desesperado. Bueno, piénsalo, me dijo (el chico es cabezota).
La siguiente fue aún mejor. Me sugirió que me apuntara a un "speed dating". ¡Ja, ja, ja! Con el ojo que tengo normalmente conociéndolos durante un tiempo, como para fiarme de él en sus apreciaciones de 10 minutos. No, no y no.
Se fue diciendo que así me va, que si no colaboro, que no me queje. ¡Pero si yo no me quejo! Fue él el que empezó la conversación con un "ya basta".