lunes, 15 de noviembre de 2010

Baby boom

Yo nací en un año que fue considerado baby boom (no voy a especificar qué año porque tampoco hace falta...) y creo que el 2010 va a ser otro. Desde septiembre a Navidad entre amigos y gente que conozco habrán nacido 10 niños, y hablo de un círculo bastante cercano. Cuando paseas por la calle no hay más que embarazadas y carritos de bebé, que por cierto hay que hacer un máster para saber cuál debes comprar y no te creas que te servirá el que hicieron tus amigas, porque para cuando tu tienes un bebé ya han cambiado todos los modelos. Resumiendo, últimamente soy la mejor clienta de ropa de bebé.

El otro día fui a por otro regalo. La dependienta, que ya me tiene más vista que el tebeo, me miró sonriendo y me preguntó ¿niño o niña? Niña, le dije y no preguntó más, me sacó la ropita de recién nacido en color rosa para que escogiera (ya sabe que no me entusiasma el beige y que soy una clasicona, azul para niños, rosa para niñas). Y en ese mundo de ositos, nubecitas, estrellitas y patitos me sentí empachada de tanta cursilería. Porque todo es muy "mono" por separado pero verlo todo junto da dolor de cabeza. Así que salí corriendo en cuanto me lo envolvió para regalo (que tardó más que Rowan Atkinson en Love Actually) y busqué un establecimiento de ropa de adultos, lo que fuera con tal de devolver a mi vista un poco de normalidad. Lo más cercano fue un Zara y ahí estuve un buen rato hasta que me pareció que mi vista volvía a ser la de siempre. Eso sí, en seguida voy a tener que repetir la operación porque aún queda alguno por llegar...

No hay comentarios:

Publicar un comentario