lunes, 8 de febrero de 2010

Abrazar la soltería

Este fin de semana me han dado mucho tema, pero el que más me ha impresionado (por no decir que estoy en estado de shock) es cuando alguien me dijo que había abrazado la soltería. No es nada malo, creo que, de vez en cuando, incluso es sano. Te sirve para pensar en ti, descubrir qué es lo que quieres y además darte cuenta de que estar acompañada es genial pero sola también tiene su punto. El shock vino cuando me dijo que eso lo había decidido hace 12 años, sí, sí, 12 años. A mí que me perdone pero eso ya es exagerado.

Cuando le pregunté el porqué de esa drástica decisión me dijo, muy seria, que se había dado cuenta de que ella no estaba hecha para vivir en pareja. Bueno, eso es posible, yo no lo creo, no creo que el ser humano esté diseñado para vivir solo, pero es posible. El problema es que ese gran descubrimiento lo hizo con 25 años. Con 25 años no estás hecha ni para vivir en pareja, ni para estar sola, ni casi, casi, para nada.

Pero ella está convencida y cerrada en banda , no se permite pensar que quizás ha cambiado en estos 12 años y puede que ahora ya está preparada. Así que no mira a su alrededor por si hubiera un galán dispuesto a hacerle cambiar de opinión. Y cuando no miras es difícil ver.


No hay comentarios:

Publicar un comentario