martes, 1 de junio de 2010

Celestina

Hubo una época en que me encantaba hacer de celestina. No con mucho éxito, he de reconocer. No entendía porque algunas amigas se molestaban porque les organizaba mal disimulados encuentros "casuales". Pero ahora la tortilla ha dado la vuelta y empiezo a comprender lo que sentían.

Cada vez que una amiga o amigo conoce a un soltero le entran unas ganas irracionales de presentármelo. Con frases como es estupendo, pegáis un montón, es como tú... intentan que aquello cuaje, y es tan forzado que es imposible. Pero lo de celestina llega incluso más allá que amigos con buenas intenciones... ¡Incluso amigas de mi madre lo han intentado! Es el colmo, no sé si llevo cara de desesperada o que simplemente han decidido que, viendo que yo no hago nada al respecto, tendrán que hacerlo ellos. Pero yo ya no creo que el método "celestina" funcione.

Así que desde aquí pido que lo dejéis estar, ya me conocéis, no hay remedio conmigo, siempre encontraré una pega, y cuando no la tiene, me la invento.

No hay comentarios:

Publicar un comentario