Sí, sí, diréis, ¡qué exagerada! De exagerada nada. Una vez hecho repaso de mi vida sentimental, he de reconocer que el problema está en mi corazón, no en que el mundo está lleno de impresentables (que los hay, y muchos). Pero también existe gente estupenda, pero el tonto de mi músculo central, no se altera ni lo más mínimo. Encima es blando, muy blando. Perdona lo imperdonable y acepta lo inaceptable. No me sirve. Así no voy bien.
Así que si alguien tiene un corazón de sobra, o el suyo no lo utiliza, por favor, que se ponga en contacto conmigo. Lo único que pido es que sea más listo y un poco más duro que el mío.
No hay comentarios:
Publicar un comentario