Lo que no entiendo es porqué van a un restaurante, bueno, en realidad, lo que no entiendo es porqué están juntos. ¿Cómo puedes estar con una persona con la que no tienes absolutamente nada de qué hablar? ¡Qué aburrimiento! Vale, no voy a descartar la telepatía, ciencia donde las haya, y puede que mientras están cenando, están teniendo una interesantísima conversación sin tener que hablar. Pero basándonos en las estadísticas, la telepatía no es una virtud que abunda, yo no conozco a nadie con ese don, ni siquiera de oídas, así que la mayoría de esas parejas no se hablan. ¡Qué triste!
En fin, que cuando yo voy a cenar con alguien, no espero tener que debatir filosóficamente de donde venimos y a donde vamos, sobre todo porque, normalmente, no tengo ni idea que voy a hacer al día siguiente, como para ponerme a discutir qué va a ser de la humanidad. Pero se puede hablar de muchas otras cosas ¿no?
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